Audi A6 3.2 FSI quattro (2004) | Espacio y buenos detalles en las plazas traseras

03/11/2004 |Juan Manuel Pichardo

El acceso a las plazas traseras es fácil aunque se trate de personas con poca movilidad. La forma y el tamaño de las puertas son adecuados, hay un buen espacio para poner los pies al entrar, y no es necesario salvar un escalón grande. Hay iluminación debajo del asiento delantero que facilita la entrada cuando está oscuro.

Las plazas traseras son para dos ocupantes, debido a la forma del asiento y a lo voluminoso que es el túnel de transmisión, que obligaría a un pasajero central a llevar las piernas muy abiertas.

El asiento es cómodo, no está muy elevado con relación al suelo, es un poco corto de banqueta y tiene una buena inclinación del respaldo. El reposacabezas alcanza una altura suficiente para proteger adecuadamente, pero le falta ajuste de inclinación.

El cinturón queda correctamente ceñido. No tiene ajuste de altura, pero por la posición en la que está resulta adecuado para personas de distinta talla.

Tiene cuatro salidas de aire independientes y orientables, dos al final de la consola central y dos más en el montante central, a una altura adecuada para refrescar el torso o la cara. Hay dos luces independientes, una para cada pasajero, con una intensidad adecuada para leer.

Dentro del reposabrazos central están los soportes para bebidas que forman parte del «paquete portaobjetos» opcional. En un compartimento superior hay un voluminoso botiquín. Otros huecos a disposición de los pasajeros son las bolsas de las puertas y unas redes tras los respaldos delanteros, que también son opcionales. El cenicero tiene el tamaño normal, donde no caben los restos de un habano de tamaño regular.

Las cortinillas tapan casi completamente las ventanillas, pero dejan al descubierto el tercer cristal lateral. Aun así, este accesorio me parece muy útil, pero tiene el inconveniente de que están en el mismo paquete de opciones que la cortina eléctrica trasera; ese paquete de opciones cuesta 1.284 €. Creo que es excesivo, aunque lleve detalles como un automatismo que baja la cortina trasera al engranar la marcha atrás, y la vuelve a subir poco después de desengranarla.

Los tiradores de las puertas están iluminados con luz roja, como casi todo el interior. Otro detalle interesante en las plazas traseras son ganchos en los montantes para colgar una bolsa pequeña o una percha.

El maletero es muy amplio, tiene una forma regular y es fácil de cargar. En el lado izquierdo hay una compuerta que esconde algunos elementos del equipo de sonido y el lector de DVD del sistema de navegación. En el lado izquierdo sí hay un pequeño hueco que se podría aprovechar para objetos pequeños, pero que no tiene tapa ni red para sujetarlos. Hay cuatro argollas cromadas en el suelo del maletero y dos ganchos en la parte izquierda. En la tapa del maletero hay un triángulo de señalización y en la parte inferior derecha hay hueco para otro.

Sujetas a la parte superior del maletero hay dos ganchos dobles y retráctiles, que me parecen muy útiles para colgar bolsas sin que se caiga lo que contienen. Cada uno de estos ganchos dobles tiene un muelle que los pliega junto a la parte superior del maletero y un asa de tejido para bajarlos (da la impresión de ser una pieza de calidad).

Hay dos accesorios que pueden ser interesantes: un fondo reversible que tiene una parte de moqueta y otra de goma para objetos mojados o sucios (125 €), y una gran red que se puede usar en toda su extensión o doblada, como si fueran bolsillos (sujeta a las argollas y a los ganchos). Lo malo de esa red es que cuesta 1.067 € (esa opción incluye una toma de corriente).

Es posible abatir el respaldo trasero (dividido en sectores 1/3 y 2/3) pero la banqueta es fija; al abatir el respaldo, quedan en un plano ligeramente inclinado. El mecanismo para desbloquear los respaldos tiene un tacto muy bueno, incluye un seguro que avisa que no está correctamente bloqueado y una cerradura para que no se pueda acceder al maletero desde el habitáculo. Lo que falta es algún mando para poder abatir el respaldo desde el maletero, además de desde el habitáculo.

He visto pocos fallos de acabo, al margen de lo que empieza a ser normal (cables al aire o cogidos con cinta aislante) y de alguna pieza mal colocada. La pieza que hace de techo está acolchada y tiene un buen tacto, pero hay otras partes del recubrimiento del techo y los montantes que son de un plástico demasiado basto para este coche y encajan mal.

Hay varias molduras de aluminio, interiores y exteriores, que se mueven fácilmente al presionarlas. El lavaparabrisas consta únicamente de dos pares de chorros oblícuos, en lugar del sistema que esparce el agua en abanico por todo el cristal (que llevan coches del grupo Volkswagen menos costosos que el A6).