El ahorro de peso se ha logrado trabajando en muchos componentes, pero la reducción principal se ha centrado en la carrocería (71 kg), el depósito de combustible incluido el líquido (46 kg; aunque tiene parte de truco: el depósito es ahora más pequeño y tiene 25 litros menos de capacidad), el eje trasero (40 kg), el delantero (27 kg), las puertas (24 kg), la transmisión (20 kg), el sistema de escape (19 kg) y los asientos (18,7 kg). Imagen con los elementos principales en la reducción de masa.

La carrocería está hecha de aluminio y acero conformado en caliente (se mete en la prensa a 900 grados, donde se imprime y se baja su temperatura a 700 ºC. Este proceso aumenta la resistencia del material). Gráfico con la distribución de estos materiales.

Audi dice que usa el aluminio en los componentes siguientes: «Los soportes para los brazos superiores de la suspensión integrados en el compartimento del motor, los anclajes colindantes, los elementos de unión entre los umbrales laterales de la carrocería y las traviesas longitudinales, así como los refuerzos del marco del portón trasero están realizados en piezas de fundición de aluminio producidas por Audi. Para las traviesas longitudinales y otras piezas de anclaje de la sección frontal, para la zona posterior de las vigas longitudinales traseras y para otros elementos de esta zona posterior se utilizan perfiles de aluminio que permiten una muy alta absorción de energía en caso de colisión.

En el suelo del habitáculo y del maletero, en las aletas traseras y en el techo se utiliza chapa de aluminio. El resultado es que este material ligero está presente en el 41 por ciento de la estructura de la carrocería. Las puertas –que son 24 kilogramos más ligeras que en el modelo predecesor–, los paragolpes delanteros, el capó y el portón trasero también están realizados en aluminio».

La suspensión delantera tiene dos brazos transversales inferiores, dos superiores y un brazo de acoplamiento (imagen de la versión con muelles neumáticos). Los brazos de control y los rodamientos son de aluminio forjado, los palieres huecos, y el espesor de las barras estabilizadoras es variable. Las manguetas son de acero forjado y los soportes para los amortiguadores están realizados en aluminio. En el portaeje se combina el aluminio con la chapa de acero.

La suspensión trasera también es de cinco brazos (imagen de la versión con muelles neumáticos), el superior acodado para una mayor compacidad en el diseño, hechos de aluminio. Los brazos sobre los que anclan los amortiguadores están fabricados mediante secciones de aluminio extruido. También se utiliza aluminio en los porta ruedas del eje trasero, mientras que el subchasis está realizado en acero de alta resistencia.

Las pinzas de freno delanteras son de aluminio y seis pistones. El diámetro de los discos varía según el motor (350 o de 375 mm de diámetro). Más adelante Audi ofrecerá como opción discos de freno cerámicos reforzados con fibra de carbono; estos discos son más ligeros, aguantan un trato exigente y tienen un precio elevado.