El Bentayga, que es el primer todoterreno que fabrica Bentley, tiene una carrocería que mide 5,14 metros de longitud, 2,00 m de anchura y 1,74 m de altura. Desde su presentación en septiembre de 2015, la gama de motores ha sufrido modificaciones (cambios en la información). El último cambio ha sido en enero de 2018, momento en el que Bentley ha añadido uno de gasolina con ocho cilindros en uve y 549 CV de potencia (por el momento desconocemos el precio de esta versión). También está disponible con un motor Diesel de ocho cilindros con 435 caballos —cuesta 198 874 €— y con otro de gasolina de doce cilindros que produce 608 caballos —241 484 €—. En los tres casos el cambio es automático de ocho velocidades, la tracción es a las cuatro ruedas y el habitáculo es apto para cuatro, cinco o siete pasajeros.

En la actualidad, el Bentayga no tiene muchos competidores directos. Dos de ellos podrían ser el Land Rover Range Rover y el Mercedes-Benz GLS—; los Mercedes-AMG GLE 63 y el BMW X5 M, son más pequeños (ficha comparativa). Por otro lado, el Mercedes-Benz G 65 AMG, comparable al Bentayga por precio y por potencia, no lo es por tipo de todoterreno (ficha comparativa).

El motor de gasolina de ocho cilindros, que es el de más reciente incorporación a la gama, tiene 4,0 litros de cilindrada, dos turbocompresores y un sistema que desconecta la mitad de los cilindros en determinadas circunstancias (principalmente cuando la demanda de potencia es baja). Genera 549 CV a 6000 rpm y 770 Nm entre 1960 y 4500 rpm. Con este motor, el Bentayga es capaz de acelerar desde parado hasta 100 km/h en 4,5 segundos y alcanzar 290 km/h, por lo que resulta más rápido que el Mercedes-AMG GLS 63 4MATIC de 585 CV y que el Land Rover Range Rover 5.0 V8 525 CV (ficha comparativa). El consumo medio de combustible, 11,4 l/100 km, también es inferior al de estos dos modelos.

El motor de 12 cilindros en W también está sobrealimentado mediante dos turbocompresores y también tiene un sistema que desconecta la mitad de los cilindros, pero es más potente (tiene 608 CV a 6000 rpm) y tiene más par motor (900 Nm entre 1250 y 4500 rpm). Con él, el Bentayga es uno de los todoterrenos más potentes y rápidos de la actualidad. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos (como un Porsche Cayenne Turbo de 549 CV) y alcanza una velocidad máxima de 301 km/h, más que ningún otro todoterreno (el citado Porsche llega a 286 km/h). El consumo medio también es de los más altos: 13,1 l/100 km. 

El motor Diesel es el mismo que Audi monta en el SQ7, de ocho cilindros en V, 4,0 litros de cilindrada y que desarrolla 435 caballos (la misma potencia que en el SQ7; ficha comparativa). Tiene sobrealimentación mediante dos turbocompresores de doble entrada y un compresor eléctrico alimentado por un circuito a 48 V (es el mismo circuito que puede alimentar al sistema de barras estabilizadoras activas que se detalla más abajo; en esta información técnica del Audi SQ7 se explica cómo funcionan ambos sistemas). El par motor máximo es de 900 Nm y está disponible entre 1000 y 3250 revoluciones. Más adelante (en una fecha aún sin confirmar) habrá una versión híbrida.

El Bentayga Diesel acelera de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos y alcanza 270 km/h de velocidad máxima, por lo que acelera igual que el Audi SQ7, que es el todoterreno Diesel más potente actualmente, y alcanza 20 km/h más de velocidad punta (debido a la limitación electrónica que tiene el SQ7). El consumo medio homologado es de 7,9 l/100 km, 0,7 l más que el Audi. Según Bentley tiene una autonomía de 1000 km. Su sistema de escape está diseñado «para que su acústica proporcione una experiencia de lo más silenciosa y sofisticada».

La caja de cambios automática de ocho velocidades tiene la función de avance por inercia: cuando se circula entre 5ª y 8ª marcha y se levanta el pide del acelerador, el cambio introduce automáticamente el punto muerto para disminuir las pérdida de velocidad que produce la retención del motor.

La suspensión es independiente en ambos ejes y tiene muelles neumáticos. Su dureza y longitud se puede variar en ocho posiciones (mediante un mando en la consola; imagen) para adaptar el vehículo según convenga a una conducción en o fuera del asfalto. Además, hay una opción denominada Responsive Off-Road Setting que ajusta diferentes parámetros del vehículo (como la altura de la suspensión, el funcionamiento del ABS y del ESP) en base a una serie programas predefinidos de tipo de superficie (por ejemplo, arena o barro).

En opción, hay un sistema eléctrico (que funciona a una tensión de 48 voltios) que modifica la rigidez de las barras estabilizadoras. Este sistema —denominado Bentley Dynamic Ride— permite incrementar el efecto antibalanceo de estas barras en las curvas (aumentando su rigidez) y mejorar la comodidad en recta (disminuyendo la rigidez) según convenga. Las llantas son de 20, 21 o 22 pulgadas. También es opcional un sistema de frenos con discos carbocerámicos de 440 mm en el eje delantero —y pinzas de 10 pistones— y 370 mm en el trasero.

La dirección tiene desmultiplicación variable y asistencia eléctrica. Esto último es imprescindible para que el Bentayga tenga funciones como el sistema de aparcamiento semiautónomo (el coche se encarga de hacer los movimientos de volante necesarios en las maniobras de aparcamiento). Otros de los sistemas disponibles en el Bentley Benyaga son: sistema de reconocimiento de señales, programador de velocidad activo y predictivo (adapta la velocidad automáticamente en función de las curvas y las señales de tráfico. Es un sistema que también tiene el Audi Q7), sistema de visión nocturna, head-up display, alerta por tráfico cruzado en la parte posterior del coche y sistema de visión cenital. 

El habitáculo puede ser de cuatro, cinco o siete plazas. Delante hay unos asientos con ajuste eléctrico y 22 posibles regulaciones. Además, tienen función de masaje, calefacción y ventilación. Con la configuración de cuatro plazas, los asientos posteriores (imagen) también tienen ajuste eléctrico (con 18 regulaciones), función de masaje, calefacción y ventilación. Asimismo, en el suelo hay un reposapiés. Como es habitual en Bentley, el cliente puede elegir entre una gran variedad de cueros, maderas y molduras decorativas para el interior. La versión Diesel tiene la inscripción «V8 Diesel» en los umbrales de las puertas y la V8 de gasolina una parrilla frontal y unas molduras laterales pintadas en color negro.

El maletero tiene un volumen de 430 litros con cuatro plazas y de 484 litros con cinco plazas (hasta la cortinilla; imagen), un valor muy pequeño dado el tamaño de la carrocería. El Range Rover tiene 550 litros, el Volvo XC90 692 litros y el Audi Q7 890 litros. La puerta del maletero se abre y cierra eléctricamente.

Hay tres sistemas de audio — Bentley Standard Audio, Bentley Signature Audio y Naim for Bentley Premium Audio—, pero en todos los casos se maneja a través de una pantalla táctil de 8,0 pulgadas que hay en la consola (imagen), tiene GPS y un disco duro de 30 GB. Los pasajeros de las plazas traseras (los dos de los laterales) disponen de sendas tabletas electrónicas extraíbles, de 10,2 pulgadas, que se fijan a un soporte que hay tras los reposcabezas delanteros (imagen). Estas tabletas, que funcionan con sistema operativo Andorid, tiene conectividad 4G, WiFi y Bluetooth.

Con el lanzamiento del Bentayga Diesel, Bentley ha presentado un nuevo acabado de personalización interior denominado Liquid Amber. Existe la posibilidad de recurrir al programa de personalización Mulliner (que permite hacer un diseño «a medida» del interior) y hay disponible para la consola central un reloj automático «Mulliner Tourbillon by Breitling» de recarga automática, «fabricado a partir de una pieza de oro macizo». Se puede elegir en oro blanco u oro rosa con la esfera de nácar o de ébano negro.

El Bentayga tiene un techo solar de cristal de 1,35 metros cuadrados de serie, que consta de dos secciones. La delantera se puede deslizar hacia atrás. Además, toda la superficie de cristal se puede aclarar u obscurecer eléctricamente.