BMW pone a la venta un Serie 5 con motor Diesel de 177 CV por 43.000 €, el 525d. Lleva el mismo motor de seis cilindros que el 530d, pero con 2,5 l de cilindrada.

Por lo que se puede ver en esta tabla, es un coche con muy buena relación entre prestaciones y consumo. Comparado con los de su tamaño y potencia, no hay ninguno que acelere más y sólo el Mercedes E 270 CDI lo mejora en consumo y velocidad máxima (con diferencias despreciables).

Por lo que hemos visto en el 530i y el 530d (ambos con la opción estabilizadoras activas Dynamic Drive), el Serie 5 tiene aspecto de estar bien hecho, su seguridad activa es de lo mejor que hay en este tipo de coches y el funcionamiento en general lo hace un coche muy agradable. Con la opción de estabilizadoras activas (que es como lo hemos probado), es también un coche estable y cómodo.

La relación entre precio y equipamiento también es buena (tabla comparativa). Casi todos los coches de este tamaño y tipo de motor tienen un precio semejante, a excepción del Saab 9-5. El equipamiento de serie es más abundante en coches más costoso, como el Lancia Thesis o el Renault Vel Satis, pero ninguno de los dos tienen un catálogo de opciones como el del Serie 5.

La diferencia de precio entre un 525d y un 530d es 3.300 € (ficha comparativa del 525d y el 530d). Aun sin saber las prestaciones del 525d, conviene considerar si es mejor dedicar esa suma a equipamiento, más que a potencia.

En el Serie 5 hay elementos muy recomendables que son opcionales, como las estabilizadoras activas (Dynamic Drive), el sistema de iluminación en curva y —si se circula mucho por ciudad o carreteras lentas— la dirección de desmultiplicación variable.

La única diferencia en el equipamiento de serie entre el 525d y el 530d es que el primero no tiene dirección de asistencia variable (Servotronic). Tampoco cabe esperar grandes diferencias de suavidad de funcionamiento o ruido, si es que hay alguna.

El motor del 525d lleva un filtro de partículas, que necesita para cumplir la normativa de emisiones que entra en vigor en 2005. El 530d que se vendía hasta ahora no tenía ese filtro, pero a partir de marzo de 2004 se empezarán a entregar unidades con él (desde abril, todas las unidades que se entreguen ya lo llevarán). El filtro que usa BMW no necesita mantenimiento ni aditivos para el combustible.