Chrysler 300C 3.0 CRD (2004) | Cómodo, no muy estable, pero sí seguro

03/11/2005 |Juan Manuel Pichardo

La seguridad activa de este 300C me parece buena, aunque el coche no tiene una estabilidad sobresaliente. La primera impresión que puede dar es la de coche torpe y, efectivamente, es menos ágil que otros modelos que tienen sus dimensiones y peso. Ahora bien, aunque es un coche al que le cuesta entrar en las curvas más que a otros y que tiene movimientos de carrocería muy amplios, no es fácil que se aparte de la trayectoria.

La suspensión parece hecha para que el coche sea cómodo, pero no es como otras suspensiones blandas. Efectivamente el coche es cómodo. Pasa sobre las pequeñas irregularidades del suelo sin transmitirlas mucho a sus ocupantes. No se balancea excesivamente, lo que tiene un efecto positivo tanto para el confort como para la estabilidad. Lo que sí hace es cabecear más que otros modelos semejantes; se nota, sobre todo, en cambios de rasante o en zonas hundidas del pavimento.

En carreteras rápidas tiene la estabilidad en recta que corresponde a un coche de este tamaño, pero se echa de menos algo más de precisión al inicio de los giros. Si el coche está en un apoyo y se manifiesta ese característico cabeceo, puede restar confianza. No obstante, aunque la carrocería se puede mover mucho, el coche normalmente no se aparta de la trayectoria.

Las ruedas de serie son de medida 225/60 18; es decir, tienen un diámetro muy grande (el desarrollo es 2.218 mm) y un perfil alto en términos absolutos (la altura del perfil es unos 13 cm).

Tal vez por la medida de las ruedas (es imposible saberlo con certeza sin probar el coche con otras ruedas, y no hay ningunas opcionales), sus reacciones en carreteras lentas acrecentan esa impresión de torpeza que puede dar. Antes de que el coche haya llegado al apoyo (que es el punto donde no hay que girar más, si la curva no se cierra), hay veces que se hace necesario cerrar un poco la trayectoria respecto a lo previsto inicialmente. También ocurre que, una vez que ya está apoyado, tiende a abrir la trayectoria.

Si la carretera está bacheada, es preciso tener más precaución que con otros coches porque ese cabeceo característico puede limitar el contacto con el suelo. La unión entre las ruedas y el bastidor es buena, se nota en que no pierde la trayectoria en todo el recorrido de la suspensión (que es grande).

Los frenos son buenos. Aunque el coche pesa mucho, están dimensionados y ventilados de tal manera que ni pierden eficacia por sobrecalentamiento ni se estropean cuando se les somete a esfuerzos intensos, prolongados y frecuentes. La potencia es también suficiente, aunque la distancia de frenada es ligeramente más larga que en otros modelos. Es de esos coches en los que da la impresión de que la frenada se alarga innecesariamente cuando está casi parado, algo que puede tener que ver con el funcionamiento del antibloqueo de frenos (de marca Ate) o con la suspensión.