Jaguar XJ (2003) | Ágil, cómodo y seguro
Cuando un coche grande es ágil, al conducirlo parece pequeño. Eso, que ocurre con el Mercedes Clase S y con el anterior BMW Serie 7, ocurre también en con el Jaguar XJ.
He conducido el XJ por carreteras medias y lentas, y me ha parecido muy agradable y muy gratificante para quien aprecie sentir la aceleración es todas las direcciones, no solo hacia delante al hundir el pedal del acelerador.
Por ese tipo de carreteras, el XJ se lleva mejor que un BMW Serie7 o un Volkswagen Phaeton, que se notan más pesados y más torpes. No he conducido aún el A8 y la referencia que tengo del Clase S es muy lejana, aunque lo que recuerdo es que era al menos igual de ágil que el XJ.
No he ido rápido por autopista, donde la agilidad no es más importante que la capacidad para mantener la trayectoria independientemente del estado del suelo, o de eventuales reacciones bruscas del conductor. Por lo que he visto en carreteras secundarias (con alguna curva rápida), ahí el XJ también es muy bueno. No sé si mejor que un Serie 7, pero sí que un Phaeton. En esas condiciones, las reacciones del Clase S también son la referencia.
Jaguar ha conseguido esta gran estabilidad y este buen tacto sin recurrir a unas suspensiones duras. Incluso el XJR tiene una suspensión que no recuerda constantemente a los ocupantes que se trata de una versión deportiva. El conductor no puede hacer ningún ajuste en los muelles neumáticos ni en los amortiguadores, pero tampoco creo que haga falta; el coche va muy bien como está.
Lo único que se puede echar de menos, ya que tiene suspensión neumática, es un sistema para subirlo de altura. Es util cuando hay algún bache muy grande, o bien para encarar rampas o pendientes pronunciadas sin riesgo de tocar con los bajos en el suelo.
Tiene control de estabilidad de serie y es desconectable, pero no veo la necesidad de desconectarlo salvo en condiciones muy especiales (con cadenas, por ejemplo). En algunos tramos del recorrido estaba el suelo mojado y el ritmo era más bien rápido, pero el control de estabilidad normalmente no entraba en funcionamiento. Se nota que está ahí si el conductor comete algún error o conduce con brusquedad.
El XJ8 3.5 que he conducido llevaba ruedas Pirelli P6000 Powergy de medida 235/50 18. Esa misma la rueda de serie en el 4.2, pero las unidad que llevé de esa versión tenía la medida opcional 255/40 19 (Pirelli PZero). Hay una diferencia de agarre entre los dos, pero no sé si más por el modelo de neumático que por la medida. Las P6000 en este coche chillaban mucho en curva y parecían dar menos agarre que las PZero.
En todo caso, hay una cierta diferencia entre estas dos versiones y el XJR, que parece tener una reacción más rápida al volante y un movimiento de carrocería algo menor. Con todo, no me parece que las diferencias sean muy grandes, ni de estabilidad a favor del XJR, ni de confort a favor del XJ8.
Los frenos tienen un recorrido inicial inútil, que dificulta la tarea de empezar a parar en el momento y con la intensidad deseada. En tres de las cinco unidades que he conducido el pedal retemblaba mucho al frenar; en uno de los dos XJR que he llevado solo podía acariciar el freno por lo mucho que retemblaba. Eran coches de pruebas, que tenían entre 8.000 y 15.000 km; es posible que en condiciones normales no existan estos problemas, y también es posible que la resistencia al calentamiento no sea muy grande.