El diseño del salpicadero y, en general, de todo el habitáculo del Kia Niro 2022 difiere mucho del que tenía el modelo al que reemplaza y se asemeja al de productos de reciente incorporación, como el Sportage y el EV6. Se percibe más moderno, aunque en algunos puntos ha habido un ligero retroceso en facilidad de uso y calidad de materiales. 

Como es cada vez más habitual en coches modernos, en el salpicadero hay dos pantallas: una para la instrumentación de 10,25 pulgadas (de serie u opcional según la versión y el nivel de equipamiento) y otra para manejar el sistema multimedia (de 8,0 pulgadas para Concept y de 10,25 para Drive y Emotion; imagen de esta última). El sistema operativo de ambas es el mismo que tiene el Kia Sportage y su funcionamiento también es idéntico: intuitivo y con menús que discurren entre sí con buena fluidez. La instrumentación, sin ser tan personalizable como algunas del Grupo Volkswagen (la opcional del Volkswagen T-Roc, por ejemplo), cumple bien con su cometido y muestra la información con claridad y sin artificios que entorpezcan su lectura.

Debajo de las salidas centrales de aire hay un panel táctil que cambia de función al toque de un botón: climatizador o sistema multimedia (imagen). Resulta llamativo las primeras veces, pero termina siendo un fastidio querer subir el volumen del audio y subir la temperatura porque no te has fijado que estaba en modo climatizador. Y al revés, querer cambiar la temperatura y tocar el volumen porque estaba en modo multimedia. El Niro anterior estaba mejor resuelto, pues contaba con un grupo de botones para el multimedia (imagen) y otro para el climatizador (imagen). Grandes, bien visibles y menos distractivos. 

También hemos observado una pérdida de calidad de materiales en algunas partes. Por ejemplo, en la zona del reposabrazos y mandos de los elevalunas de las puertas. Ahí, el Niro Emotion antes tenía un almohadillado recubierto de un material símil cuero (imagen). Ahora, en el nuevo Niro, también con nivel Emotion, es un plástico duro al desnudo, excepto la pequeña parte donde se apoya el codo, que tiene un material con un poco más blando (imagen). Además, el plástico negro piano ha colonizado una mayor área de la consola central. Ocupa la zona donde se halla situado el botón de arranque, la ruleta del cambio y otros mandos (imagen). Esta parte del coche enseguida presenta un aspecto sucio y, como justo delante de ella hay un hueco ideal para meter, por ejemplo, unas llaves, es muy probable que termine con arañazos. Tampoco nos ha gustado la ausencia de una base forrada de goma para el enorme hueco que hay entre los asientos (imagen). Las cosas que dejemos ahí van a ir haciendo ruido cuando estemos circulando. 

El Niro tiene un habitáculo bien aprovechado, con unas plazas traseras muy espaciosas, sobre todo a lo largo y alto, como en el anterior Niro. Hemos medido 77 centímetros de espacio para las piernas, que es más de lo que ofrecen prácticamente todas sus alternativas, como el Mazda CX-30, el Peugeot 3008 o el Toyota C-HR. También es más de lo que hay en un Kia Sportage, un SUV de Kia más grande que el Niro. El único que le supera en este apartado, y por solo un centímetro, es el Honda HR-V. Por otra parte, la altura hasta el techo es sobresaliente —100 cm— y aquí no hay rival que le dispute el liderato en nuestra tabla comparativa. La anchura entre puertas está en la media.

En estas plazas dos personas de 1,85 metros de estatura viajarán estupendamente bien detrás de otras dos que midan lo mismo. No solo por espacio, sino también por el confort de los asientos y por la posibilidad de cambiar la inclinación del respaldo si se quiere ir un poco más tumbado (imagen; la banqueta es fija, no se puede deslizar como en un Renault Captur). Además, el acceso que dejan las puertas es generoso, por lo que resulta fácil inslatar sillas infantiles y meter y sacar a sus ocupantes de ellas. Asimismo, como el espacio a lo largo es muy grande, quien vaya en la plaza de delante de la silla infantil no tendrá que desplazar su asiento hacia delante y reducir su hueco para las piernas.

Algunos elementos que hacen más agradable la vida a bordo en la fila posterior son: unas salidas de aire entre los dos asientos delanteros (imagen; no se puede ajustar ni la temperatura ni la velocidad del ventilador), un enchufe de 220 voltios (imagen), una toma de USB de tipo C (imagen) en cada uno de los respaldos delanteros y unos asientos calefactables con dos niveles de intensidad (solo los de los extremos). Lo que no puede tener son unas cortinillas para las ventanillas, aunque en función del nivel de equipamiento estas pueden llevar un tinte extra para dar mayor protección solar a los ocupantes. 

El Kia e-Niro tiene el piso de las plazas posteriores unos cuatro centímetros más elevado que el híbrido y el híbrido enchufable. No obstante, gracias a la generosa altura que hay hasta el techo, estamos convencidos de que esta pérdida no será un problema para personas de hasta 1,85 metros. La postura para las piernas sí es ligeramente más incómoda, pues las rodillas van un pelín más altas, aunque no tanto como para ser un fastidio. De hecho, las piernas van en una posición un poco más natural que en el Kia EV6.

El volumen del maletero varía en función de la variante elegida. La híbrida convencional tiene 451 litros, la híbrida enchufable 348 l y la eléctrica 495 l (475 del espacio principal más 20 adicionales del hueco que hay bajo el capó). En la variante híbrida convencional las formas son muy regulares y cuenta con un piso móvil que se puede colocar en dos alturas diferentes (imagen e imagen). La cortinilla que cubre el equipaje es un endeble trozo de tela que muchas veces molesta (en el anterior Niro era una bandeja enrollable que daba mejor impresión de calidad). Lo bueno es que se puede doblar y guardar en una pequeña bolsa, como algunas tiendas de campaña. El portón de las versiones con el nivel de equipamiento Emotion tiene apertura y cierre automatizados. En el resto es manual. 

El anterior Niro tenía 410 litros en su variante híbrida no enchufable, es decir, 41 menos que esta nueva generación. Parece una diferencia importante, pero según nuestras mediciones no lo es tanto e incluso en algunas cotas pierde capacidad. El maletero del nuevo Niro es un centímetro menos profundo en los extremos y dos centímetros más profundo en el centro. La anchura es un centímetro superior en el nuevo Niro, pero la altura hasta la bandeja cubreobjetos es 4 centímetros inferior. Imagen del maletero del Niro 2022 y del Niro 2016.  

Tomando como referencia los 451 litros del Niro HEV, que es la que Kia estima vender más, es un dato intermedio frente a sus alternativas de tamaño similar. Hay modelos que tienen menos capacidad, como un Toyota C-HR (377 litros en el mejor de los casos) o un Jeep Compass (424 l), y otros que tienen más, como un Nissan Qashqai (504 l) o un Peugeot 3008 (520 l). Listado de SUV de entre 4,35 y 4,45 metros de longitud, ordenados por volumen de maletero. La variante eléctrica, con 495 litros, tiene más capacidad que sus alternativas (listado de SUV eléctricos).