Lancia Thesis JTD 2.4 20 V (2005) | Grande por fuera, no tanto por dentro

20/12/2004 |Alfonso Herrero

A pesar de las dimensiones exteriores del coche (4.888 mm de largo, 1.830 de ancho y una batalla de 2.803 mm), según nuestras mediciones es el menos amplio en anchura para los hombros de las plazas delanteras y en altura para las traseras. En espacio para las piernas de las plazas posteriores aparece como uno de los mejores y es así si se mide al centro del asiento (que es como lo medimos siempre), pero hay unos 3 cm menos en la zona más próxima a donde quedarían las rodillas.

Delante hay menos problemas de espacio, aunque en las versiones con techo corredizo la altura máxima se queda en 92 cm (frente a los 99 cm que tiene sin esa opción).

Los asientos delanteros son cómodos, no excesivamente blandos y ofrecen una superficie amplia para la espalda aunque la sujeción lateral es escasa; la tapicería de piel, aunque no es de las que más resbalan, contribuye a esa poca sujeción.

Existen varias posibilidades de regulación eléctrica de estos asientos: altura e inclinación de la banqueta, apoyo lumbar, altura e inclinación del respaldo, y altura del reposacabezas.

Tienen calefacción con tres niveles de temperatura, que se seleccionan mediante una rueda giratoria en el lateral del asiento. Salvo por el calor de la calefacción, no hay manera de saber si está conectada y en qué nivel, ya que no hay ningún testigo a la vista que lo indique.

Opcionalmente se pueden pedir los asientos «confort», que incluyen ventilación (además de calefacción), masaje y contorno autoadaptable.

El volante se ajusta también eléctricamente, en altura y profundidad. Hay tres memorias para la posición de los asientos y que incluyen la posición del apoyacabezas, los retrovisores y el volante. El volante queda demasiado bajo aunque lo llevemos a su posición más elevada, y el apoyacabezas queda demasiado retrasado respecto a la parte posterior de la cabeza.

Tiene por reposapiés una superficie plana y de dimensión adecuada; el pedal de freno (de mayor tamaño por tener cambio automático) queda demasiado a la derecha para emplear habitualmente el pie izquierdo para frenar. En zonas con curvas, la rodilla izquierda puede golpear contra el asidero de la puerta (imagen).

El interior causa buena sensación por los materiales empleados. En el salpicadero hay plástico pintado, madera, piel en su parte inferior e incluso aluminio en algunas piezas. Los ajustes de piezas que están a la vista parecen buenos, pero he encontrado otros (que no se ven) que no están tan bien realizados.

La guantera se abre mediante un botón que hay en el salpicadero. Está tapizada completamente y ofrece el espacio justo para la documentación y los libros de instrucciones (el del coche tiene 379 páginas; el del sistema «Connect» suma otras 168), ya que también alberga el cargador de cds.

Bajo el mando de las luces hay un pequeño cajón, tapizado en su interior, que permite guardar unas llaves o el mando a distancia del garaje. En el apoyabrazos central, además de un compartimento con un teléfono (opción), hay una guantera climatizada e iluminada. En el hueco que queda bajo los mandos del climatizador y por delante de la palanca de cambios hay una superfice con goma antideslizante donde poder dejar pequeños objetos. Las bolsas de las puertas son estrechas.