Hay tres niveles de equipamiento: Pulse, Style y Luxury. El primero de ellos tiene como parte de la dotación de serie un equipo de sonido formado por cuatro altavoces, radio, toma USB y conexión Aux-In. Tiene una pantalla monocroma en la parte superior del salpicadero junto a los botones que permiten manejarla (imagen). No existen opciones para este nivel de equipamiento.

Los otros dos niveles, Style y Luxury, tienen una pantalla táctil a color de 7 pulgadas, radio, lector de discos compactos (compatible con archivos MP3), conexión Bluetooth para teléfonos móviles, toma USB, conexión Aux-In y una mando circular denominado «HMI Commander». El nivel Style tiene un conjunto de seis altavoces, mientras que el Luxury tiene un sistema de sonido desarrollado por BOSE con nueve altavoces y amplificador de ocho canales.

La única opción disponible es el navegador —con lector de tarjetas SD, una segunda toma USB y sistema de órdenes vocales—. El precio para ambas versiones es 400 €.

Ajustes e información del sistema multimedia

Los dos Mazda3 que hemos probado estaban equipados con la opción del navegador. En uno de ellos (versión con carrocería de 5 puertas), el sistema había ocasiones en las que no leía los datos de la tarjeta de memoria con la cartografía. También han dado errores las tomas USB, no hemos podido reproducir la música contenida en varios dispositivos USB que hemos probado, ni leer la información de un reproductor iPod. Tampoco nos ha sido posible conectar el sistema a una conexión inalámbrica Wi-fi.

La pantalla táctil de 7 pulgadas está situada en la parte superior del salpicadero (imagen). Una ubicación que ayuda a que el conductor tenga que retirar poco tiempo la vista de la carretera para visualizar la información (en el nivel de equipamiento Luxury, hay un sistema que proyecta la información sobre una lámina de plástico transparente situada encima del cuadro de instrumentos, imagen). No existen reflejos durante el día a pesar de tener un marco cromado (imagen). La pantalla reacciona rápido a las pulsaciones, aunque hemos apreciado que las huellas dactilares se quedan marcadas más que en otros sistemas con pantalla táctil, como el Composition Media empleado en el Volkswagen Golf o el R-Link del Renault Mégane. Es un sistema sencillo de utilizar, con unas letras que tienen un generoso tamaño, unos gráficos que muestran información de manera clara y unos menús bien estructurados.

Cuando el vehículo está en movimiento, la pantalla no responde a las órdenes táctiles. Para manejarla hay que utilizar un mando giratorio (denominado «HMI Commander») y un conjunto de botones de acceso directo situados entre los asientos delanteros (imagen). Este mando tiene un tacto agradable y permite moverse por los menús sin dificultad. Uno de los botones da acceso al menú «Favoritos». El usuario puede guardar emisoras de radio, números de teléfono o direcciones del navegador.

Navegación

El navegador tiene una cartografía de toda Europa —desarrollada por Navteq— almacenada en una tarjeta de memoria SD. Las actualizaciones son gratuitas durante los tres primeros años desde la fecha de la primera matriculación (no existe precio para las actualizaciones a partir de esa fecha). Para realizarlas, hay que conectar la tarjeta SD a un ordenador con conexión a internet.

Introducir un destino en el navegador es sencillo, aunque hay que dar varios pasos antes de que comience el guiado. Estos son: escribir dirección, confirmar destino, ver opciones de ruta e iniciar guiado—. A pesar de ello, es un sistema que permite introducir una dirección en poco tiempo gracias al teclado táctil, al brevísimo espacio de tiempo que hay que esperar entre pulsaciones y al listado de resultados coincidentes que se muestra de manera automática (cuando hay cinco o menos resultados). Es posible introducir un destino a través de la búsqueda de puntos de interés, utilizando los listados de direcciones (almacenadas y visitadas recientemente) o al empleo de las coordenadas geográficas.

Los mapas se pueden visualizar en dos dimensiones o en perspectiva con simulación de edificios en tres dimensiones (aunque tienen menos detalles que otros sistemas como el navegación MMI plus del Audi A3). En el margen izquierdo de la pantalla se muestra información de la ruta, en la parte superior la distancia y el nombre de la siguiente calle y en el margen derecho, en caso de circular por una autovía, información de los puntos de interés situados junto a las tres próximas salidas.

El usuario puede configurar el sistema para que le alerte entre otras cosas de la posición de los radares fijos, de las cámaras de semáforo o si se sobrepasa el límite de velocidad. También es posible configurarlo para que muestre una ruta alternativa, en caso de existir incidencias en el tráfico (utiliza datos obtenidos de la DGT a través de las ondas de radio y, opcionalmente, a través de una conexión a internet es posible tener información en tiempo real).

Comunicación

Excepto en el nivel de equipamiento básico, Pure, la conexión Bluetooth para teléfonos móviles forma parte de la dotación de serie. Hemos conectado sin problemas dos teléfonos móviles con distinto sistema operativo, son un Samsung Galaxy S3 Mini (I8190) —con sistema operativo Android 4.1 Jelly Bean y conexión Bluetooth 4.0—, un Google Nexus 4 —con sistema operativo Android 4.4.2 KitKat y conexión Bluetooth 4.0—.

Además de sincronizar la agenda y el listín de llamadas, también lo hacen los mensajes de texto y, si el sistema está conectado a internet, los correos electrónicos. Respecto a los mensajes de texto, se pueden ver en la pantalla del salpicadero y escuchar a través de los altavoces del vehículo. Es posible responder mediante una llamada o enviando un mensaje predefinido (con el vehículo parado, el usuario puede almacenar distintos mensajes de respuesta).

Es mejorable la manera de buscar un contacto en la agenda. Solo se puede escribir la primera letra, si el vehículo está en movimiento, habrá que pasar uno a uno todos los contactos que comiencen por dicha letra. Con la agenda sí se transmite la imagen del contacto aunque no la dirección vinculada. Tampoco es posible vincularla desde el vehículo.

Aplicaciones

Las aplicaciones disponibles en el Mazda3 las podemos dividir en tres bloques. El primero de ellos, son aplicaciones que no necesitan conexión a Internet para funcionar. Desarrolladas por Mazda, informan del consumo, de las emisiones de CO2 emitidas o del estado del sistema de parada y arranque automático. Otra de las aplicaciones de Mazda, se utiliza para programar el mantenimiento —el usuario puede crear un aviso indicando el número de kilómetros o el tiempo restante. También se puede programar cuando hay que rotar los neumáticos o cambiar el aceite—. No ocurre como en otros sistemas que pueden pedir cita directamente a un taller, por ejemplo, el Professional de BMW.

En el segundo bloque, están agrupadas las aplicaciones (no desarrolladas por Mazda) que para funcionar necesitan un teléfono móvil inteligente —conectado mediante Bluetooth—, con una tarifa de datos y las aplicaciones instaladas. Son dos: Aha y Stitcher. Ambas permiten escuchar música a través de internet. Con Aha, además de escuchar emisoras de radio (hay que seleccionarlas previamente desde el teléfono móvil) es posible asociar las cuentas de Facebook y Twitter para conocer las últimas actualizaciones de estado. También permite realizar una búsqueda de hoteles, restaurantes o saber el estado del tiempo (hay que activar el GPS del teléfono, depende de este para que la aplicación funcione correctamente). La aplicación Stitcher reproduce podcasts, aunque no hemos encontrado en castellano.

El tercer bloque son aplicaciones enfocadas a la ayuda a la conducción. Necesitan que el vehículo esté conectado a internet. Estas aplicaciones informan de la meteorología, del estado del tráfico en tiempo real y del precio de los carburantes. También es posible realizar una búsqueda de puntos de interés a través de Internet. No hemos podido comprobar su funcionamiento.

Equipo de sonido

Los dos niveles más equipados —Style y Luxury— tienen un lector de discos Cd que no está disponible ni como opción en el nivel básico —Pure—. La toma USB y la conexión Aux-In forman parte del equipamiento de serie en todos los Mazda3. Con el navegador, hay una segunda toma USB y un lector de tarjetas SD —si se utiliza para leer archivos de música, el navegador no funciona—. Estas conexiones están en el interior del reposabrazos central (imagen).

Mazda no ofrece la posibilidad de tener radio digital. La analógica tiene un funcionamiento correcto. En la pantalla principal, además del nombre de la emisora es posible visualizar datos del programa emitido. El usuario puede realizar un escaneado de todas las emisoras, una búsqueda manual o ver un listado con las frecuencias que mejor se reciben (en ocasiones, ha tardado al menos 10 segundos en cargar el listado).

El menú del audio es sencillo, en la pantalla principal aparecen varios datos (como  el nombre del artista, el título de la canción y del álbum) pero no se visualiza la carátula del álbum. Hay dos accesos directos que permiten buscar música, uno para explorar el dispositivo y otro, para ver los archivos almacenados en la carpeta que se está reproduciendo.

A través de la conexión Bluetooth es posible reproducir música. Dependiendo del dispositivo, los datos del audio se pueden visualizar en el vehículo (no la imagen del disco). En nuestro caso, tanto con el Samsung Galaxy S3 Mini como con el Nexus 4, los datos se han transmitido correctamente.

Las versiones básicas —Pure— tienen un sistema de sonido formado por cuatro altavoces. Las versiones Style, tienen seis altavoces y las Luxury, incorporan un sistema de sonido desarrollado por BOSE, con nueve altavoces y amplificador de ocho canales. Hemos probado estos dos últimos. Las diferencias más notables entre ambos se producen cuando el volumen es elevado. En el sistema BOSE no se aprecian distorsiones ni vibraciones. A volumen medio, ambos tienen un sonido correcto, aunque con el BOSE, la sensación de sonido envolvente es mayor —gracias a la tecnología «CenterPoint2» que analiza la frecuencia de la fuente de sonido (radio, USB, Bluetooth o Aux-In) para proporcionar un sonido envolvente multicanal—. El equipo de sonido BOSE, cuenta con un micrófono que recoge el ruido en el habitáculo para reajustar de manera automática la señal de la música —denominado «AudioPilot2»—.

Órdenes vocales

Para activar el sistema de reconocimiento de voz hay que pulsar un botón situado en el volante (imagen). Este sistema permite realizar funciones básicas referentes al audio, al teléfono y al navegador. Es mejorable sobre todo, cuando se utiliza con el vehículo en movimiento, ya que en estas ocasiones, el sistema no reconoce muchas de las órdenes dadas. Con el vehículo estacionado, el sistema también ha fallado, incluso dictando órdenes que el propio sistema ha informado que son válidas, como «siguiente carpeta». Tampoco ayuda a su uso que en la pantalla del salpicadero no se visualicen todas las opciones disponibles.

Introducir una dirección en el navegador es una operación sencilla, aunque hay que tener en cuenta que, siempre hay que indicar el número del inmueble. Cuando no lo decimos, el sistema informa de que no hay ninguna dirección válida.

Al utilizar el teléfono mediante la voz, no hemos tenido ningún problema. Hemos podido realizar una llamada dictando un número de teléfono o buscando un contacto en la agenda (al abrir la ficha de un contacto desde el menú agenda, es posible escuchar cómo hay que pronunciar el nombre del contacto).