El Mitsubishi ASX es un todoterreno de tamaño medio —mide 4,37 metros de longitud— que lleva en venta desde el año 2010. A lo largo de este tiempo, Mitsubishi lo ha actualizado en tres ocasiones: años 2013, 2017 y, por última vez, en 2018. Los cambios siempre han sido de pequeño calibre y han afectado al diseño, al equipamiento o a la gama de motores.

Con respecto al ASX 2017, en el ASX 2018 cambia ligeramente el diseño de los parachoques delantero y trasero, la ubicación de algunos mandos en la consola (como la de los puertos USB y el mando que controla la distribución de la tracción) y el diseño del reposabrazos delantero. Además, hay una mayor presencia de material acústico que, según Mitsubishi, reduce hasta en un 4 % el ruido en el habitáculo. También hay un nuevo sistema multimedia y nuevas molduras decorativas y tapizados. Por último, el volumen del maletero ha disminuido 10 litros (ahora tiene 406 litros). 

La gama de motores permanece inalterada. Hay uno de gasolina de 117 CV (versión 160 MPI) y dos Diesel, de 114 y 150 CV (versiones 160 DI-D y 220 DI-D rspectivamente). El ASX más asequible, el 160 MPI, está en venta por 17 200 euros y solo se puede pedir con un cambio manual de cinco velocidades y tracción delantera. El precio de venta de la versión Diesel 160 DI-D parte de 21 350 euros. Tiene un cambio manual de seis velocidades y se puede pedir con tracción delantera o, por 2500 euros más, con tracción total. El ASX 220 DI-D cuesta 30 500 euros y siempre tiene un cambio automático de seis relaciones y tracción en las cuatro ruedas. Listado de todas las versiones y sus precios.

Mitsubishi denomina AS&G, de «Auto Stop & Go», al sistema de apagado y encendido del motor en las detenciones. Es de serie en las versiones 160 MPI y 160 DI-D; no está disponible para el 220 DI-D.

El Mitsubishi ASX 160 DI-D con tracción delantera —es la versión que hemos probado— tiene un precio bajo en relación a sus alternativas, aunque no tanto como el del Dacia Duster Prestige dCi 109 CV 4x2 (ficha comparativa de precio y equipamiento). Un Suzuki S-Cross 1.6 DDiS GLE 2WD 120 CV es un poco más barato, mientras que un Škoda Karoq Ambition 1.6 TDI 115 CV es bastante más caro (ficha técnica comparativa).

Esta versión tiene un motor Diesel que vibra y suena poco y, aunque con él el Mitsubishi ASX no es un coche rápido, sí da la aceleración suficiente para conducir con agilidad. Su consumo de carburante es, además, bajo. El tacto del cambio manual es muy bueno porque se nota preciso y tiene recorridos cortos. Más información en las impresiones de conducción.

Hay tres niveles de equipamiento: Challenge, Motion y Kaiteki. La versión Diesel 160 DI-D siempre es Motion y la 220 DI-D siempre Kaiteki. La versión de gasolina 160 MPI está disponible con los tres.

Algunos de los elementos incluidos en el equipamiento de serie del nivel Challenge son: encendido automático de luces y limpiaparabrisas, programador de velocidad, volante regulable en altura y profundidad, faros antiniebla, radio con una entrada USB, climatizador automático y radar de proximidad trasero. En el nivel Motion es de serie, además, un sistema de acceso y arranque manos libres, una cámara de visión trasera, unas barras en el techo, un retrovisor interior con oscurecimiento automático y un sistema multimedia compatible con Bluetooth, Android Auto y Apple CarPlay y con dos entradas USB. A todo lo dicho, el nivel Kaiteki añade cosas como unos faros de xenón, un techo de cristal y un sistema de frenada de emergencia. Este último sistema es novedad en el ASX 2018 y funciona gracias a la información que captan una radar y una cámara láser. Detecta tanto a otros vehículos como a peatones y, si la diferencia de velocidad con respecto al vehículo que circula enfrente es inferior a 30 km/h, el sistema puede detener el vehículo antes de la colisión. En caso de que la diferencia sea mayor, reduce la velocidad de impacto y las consecuencias perjudiciales de este.

El ASX no puede tener sistemas de ayuda a la conducción que cada vez son más habituales, como un sistema de proyección de información en el parabrisas, una alerta por presencia de vehículos en el ángulo muerto de los retrovisores o un programador de velocidad activo.

La política de equipamiento de Mitsubishi es similar a la de otras marcas asiáticas. Esta se caracteriza por ofrecer niveles de equipamiento cerrados, en los que apenas hay opciones para elegir. Esto limita mucho las posibilidades de personalización y, en ocasiones, a renunciar a elementos deseados. Por ejemplo, si se quieren los faros de xenón, hay que elegir obligatoriamente el nivel Kaiteki, que no está disponible con el motor Diesel de 114 CV. En este listado compartivo se pueden ver todos los elementos de serie y en opción que se incluye en cada nivel de equipamiento.

El seguro a todo riesgo, sin franquicia, para un ASX como el que hemos probado —versión 160 DI-D Motion con cambio manual— cuesta 432 €/año con Qualitas Auto y 452 €/año con Balumba, las dos compañías que ofrecen la póliza más asequible para las siguientes condiciones: hombre casado de 35 años residente en Madrid, que recorre unos 20 000 km al año y que dispone de una plaza de aparcamiento en un garaje comunitario. Con el comparador de seguros de km77.com se pueden hacer cálculos de precios pólizas de otro tipo (como a terceros, a terceros ampliado y a todo riesgo con franquicia) introduciendo los datos que más se ajusten a cada persona.