Nissan actualiza una vez más el GT-R. Hay dos versiones disponibles: una con 570 caballos de potencia y otra de 600 caballos —que Nissan denomina GT-R Nismo— cuyo planteamiento es más deportivo (ficha comparativa de las dos versiones señaladas).
El GT-R más económico está en venta por 108 050 euros (todos los precios). Su relación entre precio y potencia es muy buena, pues actualmente no hay ningún vehículo a la venta en España de más de 520 caballos de potencia que sea más económico. El siguiente es el BMW M5 (122 050 euros y 550 CV), seguido del Jaguar F-Type R Coupé (122 950 euros y 550 CV). Un Porsche 911 Turbo Coupé, que tiene 540 caballos, cuesta 200 822 euros. La versión GT-R Nismo es mucho más costosa que la normal: tiene un precio de 185 000 euros.
El motor que tiene el GT-R (tanto en su versión de 570 como de 600 CV) es un V6 de gasolina con doble turbocompresor. Es el mismo que tenía el Nissan GT-R de 2008, pero desde entonces, Nissan lo ha actualizado en diversas ocasiones. Así, ese primer GT-R de 2008 tenía 480 caballos de potencia, el de 2014 (información) daba 549 caballos y el actual, 570 (ficha comparativa con algunas de las versiones que han existido del GT-R desde su lanzamiento). Por su parte, el GT-R Nismo tiene la misma potencia que el modelo precedente (ficha comparativa). La tracción es en las cuatro ruedas.
El Nissan GT-R tiene pocas alternativas en el mercado. Los cupés de su potencia con un planteamiento tan deportivo, tienen una carrocería menos espaciosa, como es el caso del Porsche 911 Turbo o de sólo dos plazas, como es el caso del Audi R8. Los cupés de potencia similar que tienen cuatro plazas razonablemente amplias, tienen una carrocería de mayor tamaño exterior y no tienen reacciones tan ágiles en curva, como es el caso del BMW M6 o el Mercedes-Benz Clase S AMG Coupé.
Para conseguir que el motor dé 570 CV en lugar de 549 CV, Nissan ha cambiado el momento de encendido y la presión a la que los turbocompresores introducen el aire en el motor. A pesar de estos cambios, el Nissan GT-R 2017 tiene las mismas prestaciones que el modelo precedente, y el mismo consumo (ficha comparativa).
Nissan también dice que «el característico sonido del GT-R se ha afinado, dando como resultado un motor que nunca antes había sonado mejor» gracias a que los silenciadores (de titanio) del escape son distintos y al sistema electrónico que produce sonido a través de los altavoces (ASE Active Sound Enhancement). La caja de cambios sigue siendo automática de doble embrague y seis relaciones.
Hay cambios en las suspensiones y el chasis el más rígido, aunque Nissan no cita qué modificaciones ha hecho. Los ajustes de la suspensión son distintos en la versión Nismo con el objetivo de «transmitir mejor la potencia del motor al suelo». Las llantas siguen siendo de 20 pulgadas de diámetro.
La carrocería tiene nuevas piezas que no sólo alteran la imagen del coche, sino que también cumplen una función práctica. El motor está mejor refrigerado gracias a que la parrilla es de mayor tamaño. La estabilidad a alta velocidad y el apoyo aerodinámico también son mejores por el nuevo capó y las modificaciones hechas en el paragolpes delantero y en las estriberas. Además, hay entradas de aire en los laterales del paragolpes trasero, junto a las salidas de escape. La versión Nismo tiene varias diferencias en la carrocería respecto a la versión «base» de 570 caballos; por ejemplo, el paragolpes delantero está fabricado en fibra de carbono (imagen).
El salpicadero y la instrumentación son distintos. Además, Nissan ha dado al interior un aspecto más lujoso ya que lo ha tapizado con cuero que dice que es de buena calidad y puede ser de dos nuevas tonalidades: marrón (Marrón tabaco) y negro (Negro samuray). Para la versión Nismo, hay asientos tipo bacquet de Recaro, los cuales van tapizados en piel y Alcantara.
El salpicadero tiene menor número de botones (pasan de 27 a 11) gracias a los nuevos controles del sistema de navegación y sonido. El volante tiene nuevas levas para «permitir al conductor cambiar de marcha a mitad de giro sin tener que quitar las manos del volante».