La diferencia estructural entre el Porsche Boxster actual y el anterior no es grande. El modelo de 2012 es tres centímetros más largo (4,37 metros) y uno más bajo que el Boxster de 2009; la anchura no cambia (ficha comparativa). La batalla sigue siendo mayor que la del 911, ya que ha aumentado seis centímetros hasta alcanzar 2475 milímetros (ficha comparativa). Y también ha crecido la anchura de la vía delantera (40 milímetros), aunque ésta sigue siendo menor que la trasera (algo que ya no ocurre en el 911; ficha comparativa de los modelos actuales y anteriores del Boxster y el 911). El centro de gravedad ha descendido seis milímetros.

El Boxster pesa, como mínimo, 1385 kg. Son 25 kg menos que el anterior, a igualdad de versión, y un peso similar al de un Audi TT Roadster e inferior al de un BMW Z4 (ficha comparativa) —este último tiene techo metálico plegable en vez de uno de lona—. Más del 45% de la carrocería del Boxster es de aluminio, como es el caso de los dos capós y la estructura de las puertas. El soporte del salpicadero es de magnesio. También se ha reducido peso al eliminar la tapa que cubre la capota cuando va plegada sobre el maletero (más información sobre dimensiones, pesos y comparación con el modelo anterior en el blog Teletransporte de km77.com). Según Porsche, la rigidez torsional estática se ha incrementado más un 40% a pesar de la reducción de peso.

La suspensión mantiene su estructura básica con los siguientes cambios: «el eje delantero con brazos de suspensión de construcción ligera tipo McPherson es de nueva construcción. Los nuevos brazos de suspensión son más compactos que en el modelo anterior y por consiguiente más rígidos y precisos a la hora de mantener la inclinación de las ruedas». El motor y la caja de cambios permanecen en su posición central, por delante del eje posterior.

Porsche asegura que los frenos han mejorado: «Pinzas de freno más rígidas en el eje delantero, guiado de la pastilla optimizado, mayor superficie de frenado y mejor refrigeración de los discos. además, el Boxster S lleva unos discos de freno de mayor tamaño en el eje delantero».

El Boxster tiene un motor de 2,7 litros de cilindrada y da 265 CV. El Boxster S tiene uno de 3,4 litros y 315 CV. Ambos son de seis cilindros en disposición bóxer con inyección directa. Porsche afirma que el primero es nuevo —han reducido la carrera—. El segundo da 5 CV más que antes. El sistema de parada y arranque automático del motor en las detenciones es de serie.

Ambas versiones del Boxster tienen una caja de cambios manual de seis marchas, una menos que la del 911. La automática de doble embrague y siete marchas «PDK» es opcional. Con la transmisión automática el consumo es menor, lo que permite que la diferencia de precio entre las versiones manual y automática del Boxster S sea muy pequeña, al entrar el segundo en el tramo anterior del impuesto de matriculación; con el Boxster no ocurre lo mismo porque las dos versiones están en el mismo tramo impositivo (ficha comparativa).

El Porsche Boxster con «PDK» gasta 7,7 l/100 km y acelera de 0 a 100 km/h en 5,7 s —5,5 s con el paquete «Sport Plus»—. Esas mediciones en el Boxster S con «PDK» son 8 l/100 km y 5,0 s —4,8 s con el paquete Sport Plus—. Un BMW Z4 Roadster sDrive35i de 306 CV cuesta menos,  es casi igual de rápido y gasta más, mientras que un Mercedes-Benz SLK, en su versión SLK 350 BlueEFFICIENCY de 305 CV, también cuesta menos, es más lento y gasta menos (ficha comparativa).

La dirección es, como la del 911, electromecánica: ya no hay una bomba y un circuito de aceite, un motor eléctrico se encarga de proporcionar la asistencia. Funciona de forma impecable (más información en impresiones de conducción).