Porsche Cayenne (2007) | Fuera de carretera
Conociendo el buen resultado del Cayenne en carretera puede resultar sorprendente ver la capacidad que tiene para superar zonas trialeras.
El buen funcionamiento de todos los elementos relacionados con la conducción fuera de carretera permite superar este tipo de obstáculos complicados con cierta facilidad. Todo ello con la intervención del conductor sobre un único mando.
Este pulsador está en el conjunto de mandos agrupados junto a la palanca del cambio. Al accionarlo una vez, conecta la reductora, eleva la carrocería hasta el nivel «Terrenos irregulares» (241 mm de altura libre), activa un programa distinto del diferencial central, adecúa el funcionamiento del control de tracción (Porsche lo llama bloqueo electrónico del diferencial «EDS», pero en realidad los diferenciales delantero y trasero no tienen ningún tipo de bloqueo).
Al conectar la reductora, el control de estabilidad («PSM») también modifica su funcionamiento para permitir un mayor deslizamiento o, por ejemplo, corregir posibles desplazamientos laterales durante un descenso. También se modifica el funcionamiento del ABS, que reduce la distancia de parada sobre superficies sueltas; este sistema puede bloquear la rueda para que arrastre y forme frente a ella un pequeño talud de tierra o nieve
Si volvemos a pulsar por segunda vez el mando que conecta la reductora, se bloquea completamente el diferencial central. Esto es útil cuando hay que pasar un obstáculo complicado que requiere de la máxima tracción posible desde el primer momento.
Una tercera pulsación sobre el mismo mando bloquea el diferencial trasero. Este diferencial es opcional y forma parte de un paquete que incluye el diferencial trasero bloqueable, diversas protecciones para los bajos (motor, depósito de combustible y eje trasero), barras estabilizadoras desconectables hidráulicamente y lavafaros.
Salvo para quien vaya a hacer un uso intensivo fuera del asfalto en zonas de difícil paso o baja adherencia, no creo que sea necesario adquirir el paquete opcional anterior. Sin el diferencial trasero bloqueable, el control de tracción es el encargado de frenar selectivamente las ruedas que pierden motricidad. Su funcionamiento, sin llegar a ser tan excelente como el del Range Rover Sport, le permite avanzar con relativa facilidad incluso cuando dos ruedas de distinto eje quedan en el aire.
Además, el Cayenne tiene otras ayudas que facilitan su utilización en el campo, como un sistema de ayuda al arranque en rampa (en las versiones con cambio manual) o un control de descensos que se activa automáticamente en función de la velocidad y la pendiente (menos de 20 km/h y más de un 20 por ciento de inclinación).
Si las circunstancias lo requieren, se puede seleccionar un nivel de la suspensión que aumenta la distancia libre al suelo hasta 271 mm (300 mm en el Volkswagen Touareg).