Renault Mégane (2003) | Motores de gasolina
En el lanzamiento habrá tres motores de gasolina. El de menor capacidad es el 1,4 litros de 98 CV que tan buen resultado da en el anterior Mégane y en el Clio. En el nuevo Mégane las prestaciones parecen igual de buenas, dada su potencia, a juzgar por las cifras que da Renault. Destaca aún más en consumo; una búsqueda en nuestra base de datos muestra que hay 20 coches en el mercado con una tamaño y potencia semejante al Mégane (sin contar los Mégane 1.4 y 1.6 que aún están a la venta). De esos 20, sólo tres gastan menos que el Mégane, y la diferencia es mínima.
No parece que haya cambios en el motor, a juzgar por cifras como la relación de compresión o el par máximo (127 Nm a 3.750 rpm). Una diferencia con la mayor parte de los modelos que aparecen en la tabla es que el Mégane no cumple la norma de emisiones Euro 4, que entra en vigor en 2005.
El siguiente es una variante del motor de 1,6 litros de cilindrada, que en el anterior Mégane daba 107 CV (79 kW) y ahora llega a 113 CV (83 kW). El nuevo Mégane pierde en prestaciones con relación al anterior (ficha comparativa) debido al mayor peso y resistencia aerodinámica, pero gana en consumo.
La principal diferencia entre el motor nuevo y el anterior es que el nuevo tiene distribución variable. Actúa sólo en el árbol de levas de admisión, tiene ajuste continuo en un arco de 45° y es del tipo en el que la variación de la posición del árbol la da una cámara más o menos llena de aceite. La relación de compresión es la misma en ambos casos: 10 a 1.
La anterior versión de 107 CV tenía un rendimiento muy bueno y un funcionamiento silencioso. Era un motor muy recomendable y preferible al 2 litros con el que coexistió un tiempo en la gama Mégane. Si el motor nuevo es aún mejor, esta versión del Mégane puede ser también muy recomendable (lo sabremos después de probarlo).
El motor de dos litros es una versión más del «Tipo F» que —con 1.998 cm³ de cilindrada— estrenó el Renault Clio Williams en 1993 (y, con 1.721 cm³, el Renault 9, creo). En el nuevo Mégane, tiene el sistema de distribución variable que también lleva la versión de 1,6 litros.
Este motor no ha tenido un rendimiento bueno en ninguna de las muchas variantes que ha habido de él, ni con 8 válvulas ni con 16 (el mejor era el inyección directa, que Renault ha eliminado ahora). Según los datos que ha dado Renault, está más o menos dentro de lo normal (tabla comparativa) , salvo porque tiene una aceleración sorprendentemente rápida para un coche de su potencia y peso. También podremos decir algo de él después de conducirlo.
Más adelante habrá una versión con turbocompresor de este motor. El motor tuboalimentado del Vel Satis da 163 CV, pero no necesariamente tendrá la misma potencia en el Mégane.