Toyota Land Cruiser (2010) | Impresiones del interior

25/04/2011 |Alfonso Herrero

El Toyota Land Cruiser es un coche amplio, tanto en la versión de tres como de cinco puertas, principalmente por la anchura.

La de cinco puertas puede tener siete plazas dispuestas en tres filas de asientos (2+3+2). Los asientos de la segunda fila (imagen) se pueden desplazar sobre un recorrido total de 135 mm. Además se pueden abatir por secciones (40:20:40). El asiento del lado derecho se adelanta 33 cm para dejar acceso a la tercera fila. El hueco que deja libre no es muy grande y, por tanto, el acceso a la tercera fila no es cómodo.

Los dos asientos de la tercera fila son opcionales. Se pueden guardar fácilmente, los dos o uno sólo, bajo el piso del maletero cuando no son necesarios. En el Land Cruiser anterior los asientos de esta tercera fila se plegaban hacia el lateral. En función del nivel de equipamiento hay previsto un dispositivo eléctrico para plegar o desplegar estos asientos (vídeo). La maniobra se realiza en 7 segundos y se puede hacer desde los botones que hay en el maletero (imagen) y los que hay en el habitáculo, sobre el paso de ruedas trasero (imagen).

El espacio mínimo y máximo disponible para las piernas en la segunda y tercera fila es el mismo según nuestras mediciones. Es decir, con los de la segunda fila totalmente adelantado el espacio para las piernas en la tercera es el mismo que cuando los de la segunda están retrasados por completo. Los cinturones de las plazas laterales de la segunda fila tienen regulación en altura, como los de las plazas delanteras. El cinturón de la plaza central está integrado en la estructura del asiento. El conductor y su acompañante pueden vigilar a los ocupantes de las plazas traseras gracias a un segundo retrovisor interior (imagen).

Al habitáculo se sube. El piso está a una distancia considerable del suelo y los estribos que tienen todas las versiones, excepto la GX, son de gran ayuda. También evitan que el barro llegue a la zona del marco de la puerta contra la que suele rozar la pierna al salir del coche. En la parte inferior de la carrocería hay dos luces (excepto en el VX), a cada lado, que iluminan el suelo y el estribo (imagen).

Todas las versiones tienen acceso y arranque sin llave. Basta con llevar el mando cerca (en un bolsillo o en el bolso) para abrir y cerrar el coche.

Los asientos delanteros (imagen) son cómodos para conducir por ciudad o en viajes por carreteras de curvas de radio amplio. En carreteras de montaña sujetan poco el cuerpo, al menos cuando están tapizados con piel.

El lateral de la consola está acolchado, en la zona donde apoya o puede golpear la rodilla del conductor y el pasajero. A mí, al conducir, la pierna me da contra el canto de la consola (que es duro) no en el acolchado. De pasajero, que tenía las piernas más estiradas, sí me apoyaba en el acolchado.

Los mandos están colocados con la dispersión que es habitual en muchos modelos de Toyota. Por ejemplo, los relacionados con la suspensión neumática y la amortiguación variable (si las tiene) quedan en el salpicadero, a la derecha del volante (imagen) y ocultos a la vista mientras se conduce. Pero también hay botones al lado izquierdo (imagen), junto al cuadro de instrumentos (imagen), además de los habituales en la columna de la dirección, la consola y las puertas. Los mandos del climatizador y del equipo de sonido (imagen) son muy grandes; según Toyota han sido diseñados para facilitar su uso incluso con guantes.

La pantalla que hay en la consola puede ser de 4,2” o 7”, ambas muestran imágenes en color. El sistema de reconocimiento de órdenes por voz no es tan bueno como el que tienen otros coches ya que, por ejemplo, no permite introducir un destino en el navegador.

Los materiales de recubrimiento que hay en el habitáculo dan buena sensación, aunque no tanta como los de un Volkswagen Touareg. Los ajustes si me parecen irreprochables. Circulando por caminos no he oído ruidos provenientes de desajustes.

La guantera que hay entre los dos asientos delanteros es muy grande (caben cuatro botellas de medio litro) y está refrigerada mediante una salida del sistema de climatización. Opcionalmente, puede ser una nevera que es capaz de enfriar más las bebidas (imagen) y que funciona con el compresor del aire acondicionado.

En las dos primeras filas de asientos hay tomas de corriente de 12 V. En el maletero hay una toma de 220 V (imagen), excepto en la versión menos equipada, donde se puede enchufar una neverita o un ordenador portátil. En las plazas delanteras hay una toma USB y una AUX para conectar un reproductor externo de música o una memoria. En las traseras puede haber un monitor en el techo y unas conexiones para fuentes de audio.

Maletero

Se accede a él abriendo lateralmente el portón. Se abre hacia el lado derecho, que es el menos apropiado en aquellos países —como España— en los que se circula por la derecha de la calzada; al aparcar, la acera suele quedar en ese lado. Hay un amortiguador en el portón para que no se cierre solo. También se puede abrir el cristal independientemente del portón.

Hay un amortiguador para que sujete parcialmente el portón al abrirlo. Además, girándolo unos grados se puede bloquear para que el portón quede fijo, algo útil si aparcamos el coche en una pendiente. Introducir la carga, si es pesada o muy voluminosa, requiere un esfuerzo grande porque el piso del maletero está muy alto (imagen).

El maletero es grande. En la versión de tres puertas tiene 381 litros de capacidad y el paralelepípedo máximo que cabe es de dimensiones 60x110x53 (profundo, ancho y alto hasta la bandeja cubre equipaje). En la de cinco puertas, tiene 621 litros si es la versón «GX» con 5 asientos o 553 litros si es de siete con los de la última fila plegados (imagen). En este último caso, cabe un paralelepípedo de 93x110x37 con los asientos de la segunda fila lo más retrasados posible (si están adelantados hay 13 cm más); si se utilizan las siete plazas, tan sólo hay 19 cm de distancia entre el respaldo y el portón (imagen).

En el maletero hay unos raíles (en las versiones VXL y Limited) para utilizar en ellos unos sistemas para organizar la carga (estos elementos se venden como accesorios) y en la parte interior del portón unos huecos con tapas para las herramientas (imagen).