En enero de 2002 se empezará a comercializar en España el nuevo Volkswagen Polo.

Bajo un aspecto semejante al Lupo en diversos rasgos, la cuarta generación de este modelo crece en longitud y se coloca como uno de los utilitarios más grandes, al borde de los cuatro metros.

En distancia entre ejes no crece proporcionalmente igual, pese a lo cual queda como uno de los utilitarios más amplios (salvo en espacio para las piernas atrás).

Volkswagen le ha añadido —de serie u opcionalmente— casi todo el equipamiento que tienen otros modelos similares, más algunas cosas nuevas, como un asiento para niños integrado en el asiento trasero.

Sin embargo, no puede tener aún airbag de cabeza y el equipamiento de seguridad activa que lleva de serie en España es inferior al de otros utilitarios modernos. En Alemania, todos los Polo tendrán ABS de serie, incluida una versión muy poco equipada que allí cuesta unos 11.200 €. En España, en cambio, será opcional en toda la gama, salvo en el 1.9 TDi 100 CV, en el que será de serie. También será una opción conjunta el control de estabilidad y el servofreno de emergencia.

La gama de motores incluye varias unidades nuevas, como dos versiones de un tres cilindros de gasolina (con 54 y 64 CV) o un inyección directa de gasolina con 86 CV. No todos estarán disponibles en España desde el lanzamiento. Los primeros en llegar serán el nuevo 1.2 de tres cilindros (64 CV) y el cuatro cilindros 1.4 16V (75 CV), este último con cambio manual y automático.

En Diesel se ofrecerá el 1.9 SDI atmosférico (64 CV), el 1.4 TDI de tres cilindros (75 CV) y el 1.9 TDI (101 CV). Poco después llegarán las versiones con el motor 1.2 (55 CV) y el 1.4 16V (101 CV), ambos de gasolina.

Durante la presentación del nuevo Polo, los responsables de Volkswagen confirmaron que aparecerán en un futuro versiones más potentes, pero no han querido desvelar ningún detalle.