Coches eléctricos | Precio, consumo, autonomía y capacidad de la batería

En esta página te mostaramos un listado de todos los coches eléctricos en venta. Puedes ordenarla por precio, potencia, consumo homologado, autonomía y capacidad de la batería.

El coche eléctrico es aquel que se mueve mediante el trabajo desarrollado por un motor o motores que funcionan exclusivamente con energía eléctrica. Los precios de la oferta en España aparecen al final de esta página —ordenados del más barato al más caro— y, como se aprecia en el gráfico, la mayoría de ellos superan los 30.000 euros.

En casi todos los coches eléctricos la electricidad procede de una batería que hay que recargar. En algunos casos el coche tiene, además, un generador auxiliar de combustible (eléctricos de rango extendido o REX, sus siglas en inglés); no es lo mismo que un híbrido enchufable, cuyo motor de combustión sí está conectado mecánicamente a las ruedas. También hay coches eléctricos que no funcionan recargando electricidad, sino hidrógeno —el Toyota Mirai, por ejemplo—. Este elemento químico reacciona en una pila de combustible y genera la electricidad necesaria para hacer funcionar el motor.

Ventajas e inconvenientes

Los vehículos eléctricos se caracterizan por ser muy fáciles y agradables de conducir, especialmente en la ciudad ya que no tienen pedal de embrague ni cambio de marchas y sus motores responden de forma inmediata y no hacen ruido. Generalmente, tienen una gran capacidad de aceleración desde parado hasta velocidades medias. Su velocidad máxima suele ser más reducida que la de un coche de combustión de la misma potencia porque no suele haber un cambio de marchas que varíe la relación entre la velocidad de salida del motor eléctrico y las ruedas.

Su uso no produce emisiones de gases contaminantes donde se conducen porque, normalmente, la electricidad se genera en zonas alejadas de las ciudades. Además, dependiendo de su producción (fuentes renovables o no), la contaminación indirecta puede ser de distinta magnitud. Por ello y por la ausencia de ruido, son muy adecuados para entornos urbanos.

Tres inconvenientes claros son que su autonomía aún está lejos de la de un coche de combustión, los puntos de recarga no abundan y el proceso de recarga es muy lento comparado con un repostaje de combustible. Por ello, para viajar con un coche eléctrico hay que planificar el desplazamiento. Hoy en día (primera mitad de 2020), los mejores eléctricos para viajar son los de la marca Tesla, ya que este fabricante ha dispuesto una red de cargadores rápidos distribuidos de forma estratégica por las carreteras principales.

Conceptos

La energía que necesita un coche eléctrico se almacena en la batería. Esa cantidad se mide en kWh (kilovatios hora). Sería algo análogo a los litros que se introducen en un depósito de combustible (no es exactamente así, más información en el glosario). No toda la energía que se almacena en la batería (capacidad bruta o total) se emplea para mover el vehículo, una pequeña parte se reserva para no dañar la batería durante los procesos de carga y descarga; la restante (capacidad útil) es la que se puede utilizar y recargar.

El dato de la autonomía homologada de un coche eléctrico se obtiene durante un ensayo (normativa WLTP). Es el número de kilómetros que es capaz de recorrer con una carga completa de la batería. Una vez terminada la prueba, se efectúa su recarga: la cantidad de energía suministrada es la cifra de consumo homologado. Durante este proceso, la mayor parte de la energía se almacena en la batería, pero hay una porción que se pierde (se transforma en calor), alrededor del 15 por ciento.

Como ocurre con los coches de combustión, la cifra de consumo homologado está lejos del real. Una estimación genérica puede ser considerar la autonomía real como dos tercios de la oficial.

Recargas

La rapidez con la que se carga una batería depende de la potencia de recarga, que se mide en kW (kilovatios). En condiciones ideales (sin tener en cuenta la eficiencia que hemos comentado antes), una batería conectada a un cargador de 11 kW almacena 11 kWh en una hora, 22 kWh en dos horas, etc. Cada vehículo admite dos valores de potencia máxima, según se cargue con corriente alterna o continua (más información sobre los modos de recarga). En los puntos en los que se cobra por las recargas, a mayor potencia, mayor coste del kilovatio.

Quien vaya a adquirir un coche eléctrico debe disponer, en su casa o en el lugar donde el coche pase diariamente mucho tiempo estacionado, un punto de recarga para evitar imprevistos (los puntos públicos no siempre funcionan o pueden estar ocupados). La instalación de una toma en un garaje comunitario no requiere del consentimiento de la comunidad, tan solo hay que comunicarlo.

De cara a la longevidad de la batería, es preferible hacer recargas a potencias bajas. Tampoco es conveniente recargarla al máximo salvo que se vaya a utilizar inmediatamente el coche.