El sistema híbrido de impulsión del 225xe iPerformance Active Tourer está compuesto por un motor de gasolina y otro eléctrico. El de combustión, que es el mismo que tiene la versión 218i Active Tourer (o el MINI Cooper), es el encargado de mover las ruedas delanteras. Tiene tres cilindros, 1499 cm³ de cilindrada y está sobrealimentado mediante un turbocompresor. Da 136 CV de potencia máxima a 4400 rpm y 220 Nm de par máximo entre 1250 y 4300 rpm.
El motor eléctrico (de tipo síncrono) mueve las ruedas traseras, tiene un grado de rendimiento del 96% y está colocado junto al eje posterior. Da 88 CV de potencia máxima a 4000 rpm y 165 Nm de par que mantiene constantes entre 0 y 3000 rpm. Está alimentado por la energía almacenada en una batería de iones de litio situada bajo los asientos posteriores con 7,7 kWh de capacidad bruta (la capacidad útil es 5,7 kWh, para aumentar su vida). La tensión nominal es 293 voltios y tiene un sistema de refrigeración mediante líquido que se encarga de mantener una temperatura de las celdas estable. La garantía de la batería es de 100 000 kilómetros o 6 años, lo que primero se cumpla.
La potencia máxima del sistema es 224 CV y el par máximo 385 Nm (ficha técnica). De acuerdo con el ciclo de homologación NEDC, el consumo medio de combustible es 2,1 o 2,0 l/100 km —valores en función del tamaño de los neumáticos—. Son cifras muy bajas que, sin embargo, no son comparables con las del resto de vehículos con motor de combustión, ya que los híbridos enchufables pueden realizar parte del recorrido de homologación en modo completamente eléctrico, es decir, con un consumo de combustible nulo. Un Volkswagen Passat GTE y un Mitsubishi Outlander PHEV, ambos vehículos híbridos enchufables con sistemas de impulsión de potencia similar (aunque con carrocerías de tamaños distintos) tienen un consumo aún más reducido: 1,7 l/100 km y 1,8 l/100 km, respectivamente (ficha comparativa).
El principal método de recarga de la batería es mediante su conexión a una toma de corriente eléctrica. Es un proceso que necesita más o menos tiempo en función de las características de la instalación. Según BMW, una recarga completa en una toma doméstica de 10 A (2,3 kW) necesita 3 horas y 15 minutos, mientras que con el sistema BMW i Wallbox (16 A y 3,7 kW) solo emplea 2 horas y 15 minutos.
BMW también ofrece un servicio denominado ChargeNow que localiza puntos de recarga, bien empleando el sistema multimedia del vehículo o bien a través de dos aplicaciones distintas para dispositivos móviles —BMW ConnectedDrive App o ChargeNow App—. Es posible programar la carga de la batería (mediante un menú del sistema multimedia) para que esta comience a una hora determinada, algo que puede ser beneficioso si la tarifa eléctrica contratada tiene discriminación horaria.
BMW ha tenido que modificar la posición y la forma del depósito de gasolina, ya que parte de esa ubicación está ocupada por la batería de alta tensión. Como consecuencia, el depósito es más reducido que el del resto de modelos de la gama (36 litros frente a 51).
Una de las principales consecuencias de la instalación del sistema híbrido en el Serie 2 Active Tourer es el aumento de peso. El 225xe iPerformance pesa 1735 kg, que son 225 más que el 225i xDrive Aut., la versión más próxima por potencia (ficha comparativa).