El BMW Serie 3 2019 es hasta 55 kilogramos más ligero que el Serie 3 2015, pero tiene una carrocería y un chasis más rígidos (la rigidez torsional es un 25% mayor). El centro de gravedad está 10 milímetros más bajo y la distribución de masas entre ambos ejes de ruedas es 50:50. De toda la reducción de peso, separando por componentes, el monocasco es 20 kg más ligero y BMW ha empleado aluminio en la suspensión y en el subchasis del motor, lo que contribuye a reducir otros 7,5 kg. El capó y los paneles delanteros de la carrocería son también de aluminio y contribuyen a reducir otros 15 kg.
La suspensión de serie tiene unos nuevos amortiguadores cuya respuesta varía en función de la elongación o compresión del muelle. BMW dice que su objetivo es mejorar el control de los movimientos de la carrocería y reducir las vibraciones cuando se pasa por encima de baches y cuando se toman curvas a gran velocidad.
Estos amortiguadores se ofrecen con dos configuraciones, la normal y una más firme si se opta por la suspensión «M sport» (ahora también disponible para las versiones con tracción total). Con esta última, también se montan casquillos, muelles y estabilizadoras más firmes y mayor caída en las ruedas. Esta configuración es un 20% más firme que la de serie y rebaja 10 mm la altura del coche.
Para la suspensión con amortiguadores de dureza variable, BMW ha recalibrado los algoritmos de funcionamiento de la electrónica que los controla, de forma que ahora también tiene en cuenta la carga del vehículo. Internamente, cambia el sistema de válvulas de los amortiguadores. BMW dice que ahora, los cambios entre modos de conducción se notan más en la respuesta de la suspensión y ha añadido un modo adaptativo (ADAPTATIVE) que actúa de forma «inteligente» en función de las condiciones de la carretera, de la conducción e incluso de la información de la ruta proveniente del sistema de navegación Professional.
Cuando se escoja la opción de suspensión «M sport», las llantas serán de un mínimo de 18 pulgadas de diámetro y los neumáticos delanteros y traseros tendrán diferente anchura (en el caso de la unidad de color azul que se ve en las fotografías, el neumático delantero mide 225/40 y el trasero 255/35, en ambos casos la llanta es de 19 pulgadas). Los frenos opcionales M Sport consisten en unos discos de dos piezas, en los que la superficie de fricción es de hierro y el núcleo, de aluminio, y unas pinzas de freno fijas de cuatro pistones delante y un pistón atrás, pintadas de color azul con el logotipo M.
El diferencial autoblocante activo, que también tiene un coste adicional, realiza la función de bloqueo mediante un motor eléctrico que es capaz de reenviar hasta 1500 Nm de par de torsión desde la rueda interior al giro (la que suele perder tracción en las curvas y, por tanto, potencia) hacia la rueda exterior. Es gestionado por el control de estabilidad (DSC) y, según BMW, su funcionamiento es más eficaz que el de los sistemas que emplean los frenos del coche para bloquear el deslizamiento de una rueda.
El motor de la versión 330i es el más potente de cuatro cilindros que usa BMW. Da 258 CV y 400 Nm. Tiene dos turbocompresores de doble entrada (twin-scroll) y una bomba de inyección que genera una presión muy alta, 350 bar. BMW emplea un filtro de partículas para cumplir la normativa de emisiones con este motor.
La versión híbrida enchufable 330e iPerformance tiene 292 caballos. El motor eléctrico tiene 41 CV y va alojado en la carcasa del cambio (es un desarrollo de ZF). La batería es de iones de litio y está colocada bajo los asientos traseros. BMW dice que el maletero de esta versión será ligeramente menos capaz que el del resto.
BMW ha interconectado la caja de cambios y la función de parada y arranque automáticos del motor con los datos del navegador y la información recogida por sensores como el radar y la cámara frontales. De este modo, por ejemplo, se evitan cambios de marcha innecesarios o que el motor se apague justo cuando el conductor quiere incorporarse a una rotonda. La función de avance por inercia está activa entre 15 y 160 km/h, tanto en el modo ECO como en el COMFORT. También dice que ha reducido el peso del sistema de tracción total del 320d xDrive y que, en modo SPORT ahora transmite más potencia a las ruedas traseras.
La versión 320d (suponemos que con las ruedas de serie, con llantas de 16 pulgadas) tiene un coeficiente aerodinámico de 0,23, casi tan bajo como el del Mercedes-Benz Clase A Sedán (0,22, el más bajo anunciado actualmente para un coche de producción, si bien este coeficiente no es directamente comparable entre modelos de distintas marcas porque no se mide en el mismo túnel de viento).
El sistema de faros más avanzados dispone de luces con tecnología LED y de lámparas de largo alcance mediante láser (BMW Laserlight). El alcance del haz de luz es de aproximadamente 530 metros, según BMW, prácticamente el doble que el de unas luces largas mediante ledes.