En verano de 2025, Citroën pondrá a la venta el C5 Aircross de segunda generación. Es más grande que el modelo anterior, tiene más equipamiento y en su gama de motores hay sistemas propulsores novedosos (eléctricos, por ejemplo). Por tamaño y tipo de carrocería, se enfrentará a modelos como el Ford Kuga, el Renault Austral, el Volkswagen Tiguan o sus primos-hermanos los Opel Grandland y Peugeot 3008/5008.
Está fabricado sobre la plataforma STLA Medium del Grupo Stellantis y tiene una carrocería que mide 4,65 m de longitud (15,2 cm más que antes), 1,90 m de anchura (+6,2 cm) y 1,66 m de altura (+0,6 cm). También la batalla es más amplia que la del modelo anterior (2,784 metros, 5,4 cm más), algo que, según la marca, da como resultado más espacio en sentido longitudinal para los pasajeros de las plazas traseras (lo comprobaremos tan pronto como lo podamos medir). El maletero, el cambio, pasa de los 580 litros que tenía el C5 Aircross de primera generación a los 565 (eso sí, ahora no hay diferencias en función del sistema propulsor instalado).
La gama de motores es idéntica a la que tienen los Opel Grandland y Peugeot 3008/5008, tres modelos con los que igualmente comparte plataforma y la mayoría de elementos mecánicos (todos forman parte del Grupo Stellantis). Hay una versión de gasolina con hibridación a 48 V, una híbrida enchufable y dos eléctricas que se distinguen por la potencia y, sobre todo, por la capacidad de su batería. Fichas técnicas de todas las versiones.
La versión más sencilla es una de gasolina con hibridación a 48 V que recibe el nombre de «Hybrid». El sistema está compuesto por un motor de gasolina de tres cilindros y 136 CV, uno eléctrico de 12 CV integrado en la caja de cambios (automática de doble embrague y seis relaciones) y una pequeña batería de 0,9 kWh de capacidad que está ubicada bajo el asiento del pasajero. Es un sistema que está a medio camino entre uno híbrido ligero y uno híbrido convencional porque, aunque funciona con una red eléctrica adicional de 48 V, el motor eléctrico tiene capacidad para mover el coche sin intervención del de combustión (de manera muy limitada, eso sí). La potencia máxima conjunta es de 145 CV.
La versión híbrida enchufable está compuesta por un motor de gasolina de cuatro cilindros y 150 CV, uno eléctrico de 125 CV y una batería de iones de litio con 21,0 kWh de capacidad bruta. La potencia máxima conjunta es de 194 caballos y la autonomía en modo eléctrico, de 86 kilómetros. Como en la versión Hybrid, el cambio es uno automático de doble embrague, pero con siete relaciones en lugar de seis. El cargador embarcado de serie es uno de 3,7 kW (5:15 horas para una recarga completa), pero opcionalmente se podrá pedir uno de 7,4 kW con el que se reduce el tiempo de espera hasta las 2:55 horas.
Una de las principales novedades del C5 Aircross 2026 es la posibilidad de pedir versiones eléctricas. Citroën ofrecerá dos, ambas con un solo motor y de tracción delantera. La más sencilla tiene 213 CV, una batería de 73 kWh y una autonomía homologada de 520 km, unos datos prácticamente calcados a los de las versiones equivalentes de los Opel Grandland y Peugeot 3008. La segunda versión eléctrica es un poco más potente (231 CV), pero sobre todo tiene más autonomía (hasta 680 km) porque la batería es mucho más grande: 97 kWh de capacidad.
Ambas versiones eléctricas se pueden cargar en corriente continua a 160 kW y en alterna a 11 kW. No obstante, en 2026, Citroën ofrecerá un cargador embarcado opcional más potente, de 22 kW, que además incluirá la función V2L (Vehicle To Load; es decir, que además de cargar la batería, servirá para suministrar energía a dispositivos eléctricos externos).
Para la suspensión, Citroën vuelve a utilizar amortiguadores con topes hidráulicos, una solución que, por nuestra experiencia, hacen que el coche sea especialmente cómodo (prueba del C5 Aircross anterior). Lo que es novedad es la posibilidad de montar unas llantas de 20 pulgadas (antes hasta 18"). Y aunque no es un coche especialmente adecuado para circular por terrenos con dificultades, la distancia libre hasta el suelo es buena, de 200 mm.
Por dentro, el aspecto del salpicadero es completamente distinto al del modelo anterior (imagen). Como es habitual hoy en día, hay dos pantallas, una para la instrumentación (de 10 pulgadas y con varias vistas personalizables) y otra para el sistema multimedia (de 13 pulgadas, con resolución HD y colocada en posición vertical).
Según la marca, esta última es muy fácil de utilizar —a pesar de que aglutina la mayoría de las funciones del coche— porque es posible añadir accesos directos en el menú principal y tiene un sistema de reconocimiento de comandos vocales avanzado que funciona mediante ChatGPT. Adicionalmente, como es habitual, incluye funciones como Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos, un navegador con planificador de rutas (en las versiones eléctricas) y conexión a a internet para recibir actualizaciones OTA (Over The Air; inalámbricas en español).
En las plazas traseras, Citroën dice que hay 51 mm más de espacio para las piernas que en el modelo anterior (que iba justo en este sentido) y lo mismo que en el C5 X (en el que, según datos propios, hay 72 cm, que no es un dato sobresaliente). A pesar de ello, hay dos detalles que suponen un paso atrás en cuanto a practicidad con respecto al modelo anterior: las banquetas posteriores ya no son tres asientos individuales (imagen) y, además, no se pueden ajustar en sentido longitudinal (en el modelo anterior se podía hacer en 15 cm). Lo que sí conserva son tres respaldos individuales con ajuste en inclinación (entre 21 y 33º).
Los sistemas de seguridad y asistentes a la conducción son muy numerosos. Citroën ofrece un paquete de equipamiento llamado Drive Assist 2.0 en el que se incluyen el cambio semi-automático de carril (el coche puede hacer la maniobra si las condiciones lo permiten y si el conductor da su aprobación vía un botón del volante), una alerta de tráfico cruzado al circular marcha atrás con función de frenado, un programador de velocidad activo que actúa junto con el de mantenimiento de carril, un detector de vehículos en el ángulo muerto o un sistema que supervisa el nivel de atención del conductor y emite alertas si este disminuye o realiza maniobras erráticas.
Otros elementos de equpamiento que estarán disponibles en el nuevo C5 Aircross son unos faros matriciales de ledes, un techo panorámico de cristal de 1069 x 720 mm, un sistema de información proyectada en el parabrisas con posibilidad de personalizar la información mostrada, uno de iluminación ambiental con ocho colores a elegir o un portón del maletero con apertura y cierre automatizados y función manos libres.
En octubre de 2024, Citroën adelantó con fidelidad el aspecto y algunos aspectos técnicos de este C5 Aircross con el prototipo «C5 Aircross Concept» (más información).