El CUPRA Tindaya es un prototipo presentado en el Salón de Múnich de 2025. Su carrocería mide 4,72 metros de longitud y está algo más alejada del suelo lo que viene siendo habitual en un turismo convencional. La parte posterior de la misma describe una caída larga y pronunciada, que podría hacer pensar que estamos ante un vehículo de tipo cupé. En realidad tiene cuatro puertas laterales, con la peculiaridad de que las posteriores se abren en sentido opuesto a las delanteras (de adelante hacia atrás). Las llantas son muy grandes, de 23 pulgadas.
No se han comunicado datos técnicos, solo que anticipa el estilo de los futuros coches de la marca. Markus Haupt, CEO interino de CUPRA ha declarado que «Mientras muchos se alejan del conductor, nosotros apostamos por lo que más importa: la conexión al volante. Nuestra atención se centrará siempre en la emoción de conducir». Esta afirmación resulta cierta puesto que CUPRA suele poner énfasis en el ajuste dinámico del chasis de sus coches.
Hay cuatro asientos independientes (CUPBucket) que parecen flotar en el interior y se sitúan, dos a dos, a ambos lados de una especie de túnel o consola que recorre longitudinalmente el habitáculo. El volante no tiene aro superior ni inferior (es de tipo «yoke») y contiene unos cuantos controles para que el conductor pueda manejar los parámetros del coche sin distracciones. La única pantalla, de 24 pulgadas, está situada detrás del volante. En la consola hay un mando de cristal («The Jewel») que activa las experiencias exclusivas CUPRA (afectan a los modos de conducción, luz ambiental y a los efectos de sonido).
Tindaya es el nombre de una montaña de 401 metros de altura que hay en Fuerteventura (Canarias).
Actualmente, la gama de CUPRA está formada por los modelos Ateca, Born, Formentor, León, Tavascan y Terramar, a los que próximamente se sumará el Raval, un turismo urbano eléctrico.