La edición especial, aligerada y potenciada de la gama Ferrari 296 (GTB y GTS) se llama Ferrari 296 Speciale y está disponible tanto con carrocería cerrada como con una descapotable (296 Speciale A; la A viene de Aperta, abierto en italiano). Tiene 881 CV, pesa 60 kg menos que el 296 GTB y la carga aerodinámica es un 20 % superior. La tracción es en las ruedas traseras.
El sistema de impulsión híbrido enchufable está formado por los mismos componentes: un motor de gasolina V6 biturbo de 3,0 litros y 8500 rpm de giro máximo, un motor eléctrico de flujo axial y una batería de 7,45 kWh. Pero para el 296 Speciale, Ferrari ha utilizado los mapas de gestión del motor de combustión y de los turbos del 296 Challenge (esto ha incrementado un 7 % la presión máxima en la cámara de combustión), ha reforzado los pistones, reemplazado las bielas por unas de titanio más ligeras (las mismas del Ferrari F80) y ha aligerado el cigüeñal.
El conjunto de pistones, bielas y cigüeñal es 2,2 kilogramos más ligero que en el 296 GTB. Además, siguiendo el mismo enfoque que en el motor del coche de competición de Le Mans 499P, ha limado el bloque y el cárter para eliminar el exceso de material y aligerar el conjunto 1,2 kilogramos. También ha reducido el peso de piezas aparentemente insignificantes como el de algunos espárragos y tornillos, con los que ha logrado ahorrar nada menos que 1,9 kilogramos. Además, el turbo es 1,2 kilogramos más liviano que en el 296 GTB. Todo esto ha hecho que la potencia máxima del motor de combustión pase de 663 a 700 CV, que el par ascienda de 740 Nm a 755 y que la respuesta al acelerador sea más rápida.
Por otra parte, el motor eléctrico también ha recibido mejoras, especialmente en el sistema de refrigeración, gracias a las cuales la potencia máxima asciende a 180 CV (166 CV en el 296 GTB; el par máximo no cambia: 315 Nm). Ferrari dice que esta mejora de rendimiento la ha utilizado para cambiar la gestión de la transmisión (automática de doble embrague y ocho relaciones) y acortar los tiempos de cambios de marcha.
En total, el conjunto impulsor del 296 Speciale da un máximo de 881 CV, por los 829 CV del 296 GTB. Las cifras de aceleración son, en consecuencia, mejores, aunque el margen es pequeño: 0-100 km/h en 2,8 s y 0-200 km/h en 7,0 s (2,9 y 7,3 s el 296 GTB; el 296 Speciale A hace el 0 a 200 km/h en 7,3 s). La velocidad máxima es de «más de 330 km/h», es decir, la misma que en todos los 296. Dónde hay una gran ganancia es en el tiempo por vuelta al circuito de Fiorano, que el 296 Speciale completa en 1 minuto y 19 segundos, esto es, tres segundos más rápido que el 296 GTB.
Esta sustancial reducción de tiempo por vuelta se debe, en gran medida, a una mejora de la aerodinámica, que Ferrari cifra en un 20 %. Más específicamente dice que a 250 km/h el 296 Speciale puede generar 435 kilogramos de fuerza descendente, por los 360 kg del 296 GTB a la misma velocidad. En ambos casos, estos números se consiguen cuando los coches se configuran en modo «High Downforce». Para los dos también existe otro modo de baja carga aerodinámica («Low Downforce») y como novedad, solo para el 296 Speciale, hay un tercer modo llamado «Medium Downforce».
Otra área de mejora se halla en la suspensión, que no solo reduce la altura de la carrocería cinco milímetros, sino que además dispone de un nuevo ajuste para muelles y amortiguadores que reduce hasta un 13 % el ángulo de balanceo en las curvas. En lo que respecta al peso, la pérdida de los 60 kilogramos citados al inicio de este artículo se debe, entre otras cosas, a una mayor proporción de piezas de la carrocería fabricadas en fibra de carbono y a todas las piezas aligeradas en la parte del motor que ya hemos comentado. El 296 Speciale A es 80 kg más pesado que el 296 Speaciale.
El 296 Speciale tiene cuatro modos de funcionamiento del sistema propulsor: eDrive (eléctrico, con una autonomía de 25 kilómetros y una velocidad máxima de 135 km/h), Hybrid (modo híbrido, es el modo que se activa por defecto al arrancar), Performance (el motor de combustión siempre está encendido y prioriza mantener la batería con carga a la circulación en modo eléctrico) y Qualify (modo de máximo rendimiento).
Para el Ferrari 296 Speciale, Michelin ha desarrollado una especificación individualizada del neumático Pilot Sport Cup 2. Estos tienen unas dimensiones de 245/35 R20 delante y 305/35 R20 detrás. Las llantas son únicas para el 296 Speciale y están fabricadas en aluminio forjado.
La garantía es de 3 años para el vehículo en general y de 5 años para los componentes del sistema híbrido. Ferrari ofrece, no obstante, una extensión opcional de la garantía para un total de siete años, que incluye todas las rutinas de mantenimiento durante los primeros siete años de vida del vehículo. Este programa opcional de garantía llamado Genuine Maintenance Programme ofrece dos opciones: revisión cada 20 000 km o una vez al año (sin límite de kilómetros). Se elija lo que se elija, el coche será «meticulosamente» revisado por un equipo mecánico de Ferrari formado en Maranello.
Las series especiales de los deportivos con motor central de Ferrari comenzaron con el 360 Challenge Stradale, si bien del F355 hubo un paquete opcional llamado Fiorano Handling Pack que más o menos podría encajar dentro de la línea histórica. Tras el 360 vino el 430 Scuderia, el 458 Speciale y el 488 Pista. Todos ellos con un motor V8.