Lancia le ha dado al Thesis la faceta distintiva de los constructores latinos, de la que también son ejemplo el Renault Vel Satis, el futuro Citroën C6 y, en menor medida, el Peugeot 607.
El Thesis también se distingue por su tamaño, mayor de lo normal en coches de esta clase en longitud y en batalla (y semejante aquí al Peugeot 607). Esto es un punto de partida para conseguir una buena habitabilidad, pero sólo se distingue por el espacio longitudinal en las plazas traseras. En otras medidas tiene una amplitud normal o escasa (muy escasa en el caso de la altura trasera).
Lancia no ha facilitado aún el dato deresistencia aerodinámica, pero debe ser más bien alto, atendiendo a la velocidad punta de cada versión.
El Thesis puede tener muchos elementos que no serán de serie en toda la gama. Uno de ellos son los asientos delanteros con ventilación interior (un ventilador en el respaldo y dos en la banqueta), respaldos delanteros que se adaptan automáticamente a la espalda mediante cojines inflables (y pueden dar un masaje) o asientos traseros con calefacción. La instrumentación está hecha con dos grandes indicadores analógicos proyectados, que dan la sensación de tres dimensiones.
Puede tener un sistema de ventilación dividido en tres zonas; no será equipo de serie, como lo es el de dos zonas en el Lybra. Además del ajuste independiente de temperatura para conductor y pasajero, hay un tercer ajuste independiente para quienes viajan en las plazas traseras, que pueden elegir temperatura y distribución del aire. El sistema tiene en cuenta la temperatura interior, la exterior y la incidencia del sol. Una innovación de este sistema de ventilación es que tiene la posibilidad de difundir mediante unos pequeños orificios, en vez de las salidas normales, lo que limita la formación de corrientes. Tiene recirculación de aire automática (se cierra ante determinados agentes contaminantes), filtro de polen y de carbón activo.
Tiene de serie faros de xenón, con una sola lámpara en cada uno de ellos para las cortas y las largas. Son faros hechos por Hella, que proyectan la luz a través de una lente y que utilizan un elemento móvil para cambiar de cortas a largas. Como otros faros de este tipo, tienen un corrector de altura automático, para que no deslumbren. Los pilotos traseros no son de bombilla, sino de diodos (30 cada uno). Un diodo tiene una vida útil mucho mayor a la de una bombilla (y a la del propio coche) y se enciende en una milésima de segundo (una bombilla requiere dos décimas).