Mercedes-Benz Clase B (2012) | Impresiones del interior
El Mercedes-Benz Clase B mide 4,36 metros de longitud y tiene cinco plazas sin la posibilidad de instalar siete. Actualmente, ningún monovolumen de menos de 4,4 metros de longitud puede llevar siete plazas excepto el Volkswagen Touran. El siguiente más próximo por tamaño que puede llevarlas es el Toyota Verso, que mide 4,44 m.
Los asientos delanteros están 86 mm más cerca del suelo que en el modelo anterior (dato facilitado por Mercedes-Benz). A pesar de esa reducción, el espacio libre al techo para los ocupantes se mantiene casi inalterado dado que la altura del techo también es inferior.
Plazas posteriores y maletero
El Clase B es espacioso para cuatro ocupantes, pero no está dentro del grupo de los monovolúmenes de su tamaño más amplios. En las plazas posteriores, los datos de altura libre y espacio para las piernas están en una posición intermedia en relación a sus rivales. El peor dato es la anchura disponible entre puertas, alejado del que ofrecen modelos como el Toyota Verso o el Peugeot 5008.
Además de que no tiene mucha distancia entre puertas, hay otros dos motivos por los que este modelo no es muy adecuado para transportar a tres ocupantes en las plazas posteriores. El primero es que esta plaza central es estrecha, dura y más pequeña que los dos laterales (imagen y vídeo con éste y otros detalles). Algunos competidores del Clase B ofrecen tres asientos traseros independientes y del mismo tamaño (o muy parecido) como por ejemplo el Citroën C4 Picasso y el Volkswagen Touran. En segundo lugar, la zona central del piso tiene un abultamiento que impide que el ocupante pueda apoyar cómodamente los pies; para salvar este «túnel» hay que llevar las piernas abiertas.
Los respaldos se pueden plegar sobre sus banquetas pero la superficie resultante no es plana (imagen), sino que queda en ligera pendiente (en el anterior Clase B y en otros muchos monovolúmenes, la superficie resultante sí es plana).
Si se añade la opción «EASY-VARIO PLUS» (el vídeo que acompaña a este texto corresponde a un Clase B con esta opción) los asientos se pueden desplazar longitudinalmente 14 centímetros (imagen), con lo que el volumen del maletero pasa de 486 a 666 litros a costa de reducir el espacio para las piernas en las plazas traseras y cambiar la inclinación de sus respaldos. Esta opción también permite abatir el respaldo del acompañante delantero para transportar objetos muy largos (imagen).
El acceso a las plazas posteriores es cómodo porque las puertas son grandes y abren en un ángulo amplio. Curiosamente (no es frecuente en monovolúmenes), el cristal de las ventanillas de las puertas posteriores no baja completamente.
Como opción, se pueden instalar mesitas en los respaldos de las plazas delanteras (imagen). Esta opción viene dentro de un paquete que también incluye redes para guardar objetos y cajones bajo los asientos anteriores. En las plazas posteriores hay fijaciones (Isofix y Toptheter) para sillas infantiles. Opcionalmente, el Mercedes-Benz Clase B puede llevar dos asientos infantiles integrados (constan de banquetas más elevadas y de reposacabezas específicos). Los pasos para convertirlas en plazas aptas para adultos es sencillo.
El maletero tiene un fondo que se puede colocar a dos alturas. Por debajo queda sitio para el kit de reparación de pinchazos (imagen; el Clase B no puede llevar rueda de repuesto ni en opción), herramientas y algún bulto que no sea muy grande. Si el coche está equipado con el sistema de sonido Harman/Kardon Logic 7, gran parte de ese hueco queda ocupado por el amplificador.
Cuando el portón del maletero está completamente abierto, su borde inferior queda a 1,87 metros del suelo. Según el manual de usuario, la carga máxima del maletero es 100 kilos.
Plazas anteriores
Los asientos me han parecido cómodos. Sujetan bien lateralmente y que dan un apoyo uniforme a toda la espalda. No obstante, para conseguir un ajuste preciso puede ser necesario instalar la regulación lumbar, que es opcional. Nuestra unidad de pruebas no tenía este ajuste y yo hubiera preferido un poco más de apoyo en la parte inferior de la espalda; aún así, he viajado muy cómodo. La regulación que cambia la inclinación de la banqueta (a la derecha de esta imagen está el mando de regulación) también se paga por separado.
Si se instala el paquete de equipamiento «Pre-Safe» los cinturones delanteros se tensan automáticamente al abrocharlos para eliminar las posibles holguras que se producen con la ropa y así aumentar su efectividad.
Es posible optar por regulaciones eléctricas (con memorias) para la posición de las banquetas y los respaldos. También es posible instalar calefacción, pero no ventilación. La tapicería puede ser de tela, cuero o una combinación de tela y cuero.
Los asientos se pueden colocar muy altos o bajos (el recorrido vertical es grande). En su posición inferior quedan muy cerca del piso de la carrocería, prácticamente como en un turismo. Cuando están abajo del todo, el borde inferior de la ventanilla queda alto respecto al cuerpo (por este motivo, el Clase B también se parece más a un turismo que a un monovolumen, donde normalmente la ventanilla comienza casi a la mitad de la altura del tronco).
El salpicadero cambia de aspecto en función de si el coche lleva cambio de marchas manual o automático. Si lleva el automático, la palanca para seleccionar marchas va detrás del volante y se gana un hueco de gran tamaño entre los asientos delanteros (aspecto de la consola con cambio manual y con cambio automático). En general, hay suficientes huecos repartidos por el interior para guardar objetos.
Un fallo que he encontrado en el puesto de conducción es que el mando ubicado entre los asientos (imagen), desde el cual se manejan las funciones de la pantalla del salpicadero, queda demasiado retrasado. Para alcanzarlo, tenía que girar mucho el hombro y echar el brazo para atrás, tanto, que el codo en ocasiones me daba con el resalte del respaldo. Quizá no tenga ese problema una persona muy alta que se siente muy alejada del salpicadero.
Otro fallo que he encontrado es que los mandos del sistema de ventilación están demasiado bajos, en una posición que obliga a retirar la vista de la carretera para manejarlos. Además, desde el punto de vista del conductor no se ve bien la escala del ventilador. En el caso de que el coche no lleve instalado el climatizador automático, el problema se acentúa pues habrá que tocar sus mandos con mayor frecuencia.
La conexión Bluetooth permite, por lo general, descargar de una sola vez todo el listín telefónico de la agenda del teléfono para poder consultarla desde el coche. Digo «por lo general» porque lo he conseguido hacer con todos los teléfonos que he probado, salvo con un modelo antiguo (un Nokia 6021). El sistema de sonido también permite reproducir archivos de audio utilizando como fuente un dispositivo con bluetooth (por ejemplo, el propio teléfono).
Mercedes-Benz da a elegir dos tipos de navegadores, con grandes diferencias entre ellos: el precio, sus funciones y su aspecto. Uno se llama «Becker MPAP PILOT» y cuesta 850 euros y el segundo «COMMAND Online APS» y su precio supera 4 000 euros. El primero tiene una pantalla de menor tamaño y una calidad gráfica también inferior, pero a mí me ha parecido que cumple bien su función. El navegador más avanzado tiene además de una pantalla de mayor tamaño (8 pulgadas) y cartografía con gráficos de mayor calidad, otras muchas prestaciones adicionales, como lector de tarjetas «SD», conexión a internet y disco duro como soporte para la cartografía y para archivos de sonido.
Los dos sistemas de navegación tienen reconocimiento vocal para introducir direcciones en el navegador. En el Clase B no he podido probar los dos sistemas de reconocimiento vocal, pero sí en otros Mercedes-Benz y el que va asociado al navegador de mayor precio funciona mejor («entiende» mejor lo que se dice). En los dos se puede introducir una dirección (por ejemplo ciudad, calle y número) pronunciándola de una sola vez.
El interior se puede elegir con cuatro niveles de acabado (además del de serie), denominados «Chrome», «Sports», «Exclusive» y «Night Package». El programa de personalización también incluye la posibilidad de que el salpicadero vaya cubierto de cuero. Todas las unidades que he conducido hasta la fecha del Clase B tenían instalados alguno de esos paquetes de equipamiento. Con ellos, el interior del Clase B tiene un aspecto moderno y vistoso.