Plazas delanteras
Las plazas delanteras del Astra GTC son iguales que las del Astra 5p (más información) y Astra Sports Tourer (más información). La única excepción importante es que la visibilidad alrededor en todas las direcciones es peor en el GTC. Los montantes del parabrisas —gruesos y muy tendidos— molestan en giros pronunciados (por ejemplo al doblar esquinas en ciudad o en carreteras de curvas muy lentas), pero lo peor es la visibilidad hacia detrás. En un coche así, me parecen casi imprescindibles los sensores de aparcamiento (opcionales) y casi es un fallo que no pueda tener cámara posterior.
La posición de conducción es muy buena si nos ceñimos exclusivamente a la ubicación del volante (y a sus amplias posibilidades de regulación), pedales y a la calidad de los asientos opcionales que tenía nuestra unidad de pruebas. Estos asientos (Opel los llama «ergonómicos deportivos», imagen) son cómodos y sujetan muy bien. Se puede ajustar la longitud de su banqueta, su inclinación y la regulación lumbar es eléctrica (imagen de los mandos con los que se realizan estos ajustes). Yo quizá sí pagaría por ellos, aunque me parece imprescindible probar primero los de serie (posiblemente sean satisfactorios).
Aunque los asientos delanteros se coloquen en su posición más baja, no quedan muy cerca del piso como en algunos cupés. De hecho, en el Astra GTC no se va sentado apreciablemente más bajo que en un Astra normal.
Al Astra GTC le pasa como al resto de los Astra de la gama actual: en la consola hay demasiados botones (imagen). He escuchado opiniones de todo tipo: las más recurrentes han sido que tantos botones son excesivos para las personas que buscan sencillez de manejo y que quienes tienen problemas de visión quizá no distingan bien lo que pone en cada uno (en efecto, las letras o números que aparecen sobre cada botón pueden ser pequeñas)
Otro posible inconveniente del puesto de conducción que podrán encontrar algunos conductores (dependerá de cómo cada uno se acomode al volante) es que para insertar la 2ª, 4ª y 6ª velocidad hay que desplazar mucho el brazo hacia atrás y en algunos casos se golpea con el codo en el apoyo lateral del asiento.
Plazas traseras
La principal diferencia del Astra GTC con respecto al Astra 5p está en las plazas posteriores. El GTC tiene dos centímetros menos de espacio longitudinal (para las piernas), cuatro en altura y seis en anchura. Otra diferencia importante es que, como las ventanillas son mucho más pequeñas, el interior es menos luminoso y da menos sensación de espacio (a algunas personas les puede llegar a parecer algo agobiante).
El Astra GTC es más adecuado que el Volkswagen Scirocco y que el Renault Mégane para llevar dos ocupantes en las plazas posteriores pues tiene más altura libre al techo. En el Astra GTC caben bien ocupantes de hasta 1,80 metros de altura, incluso algo más. El Volkswagen Scirocco tiene la mejor cota de espacio para las piernas, mientras que el Renault Mégane es el más pequeño tanto en altura libre como en espacio para las piernas.
Aunque el Astra GTC tiene cinco plazas homologadas, es complicado que tres adultos viajen con un mínimo de comodidad en las plazas posteriores porque la anchura es escasa. En todo caso, si se tiene pensado utilizar la plaza central aunque sea de vez en cuando, me parece imprescindible poner el reposacabezas central (que es opcional). Ninguno de los rivales
Como en casi todos los turismos de carrocería de tres puertas, el acceso a la parte trasera del habitáculo requiere agacharse un poco y dejarse caer sobre la banqueta. Salvando eso, el acceso a las plazas posteriores no es muy dificultoso porque las puertas abren en un ángulo amplio y los asientos delanteros se puede desplazar mucho hacia delante (y además, recuperan su posición original una vez abatidos). Como la carrocería no es muy baja, no hay que agachar mucho el cuerpo para entrar.
Los pasajeros de las plazas traseras a su disposición diversos huecos para llevar objetos y un plafón de iluminación. En caso de no utilizar la plaza central, puede llevar un reposabrazos con dos espacios para botes de bebida y un pequeño cajón (imagen). En el techo no hay asideros, en su lugar hay un dos perchas para colgar prendas.
Maletero
Hay dos maneras de desbloquear la tapa del maletero: mantenimiento pulsado durante unos segundos un botón del mando a distancia o pulsando el área inferior del logotipo de Opel que hay colocado en el portón —este último mecanismo de apertura ha sido difícil de encontrar para algunas personas ya que si se pulsa el centro del logotipo o el área superior no funciona—.
El maletero tiene 380 litros de capacidad. Es similar al de un Renault Mégane Coupé (377 litros). Un Audi A3, un KIA pro_cee'd o un Volkswagen Golf tienen algo menos. Un Volvo C30 tiene mucho menos (listado ordenado por tamaño de maletero).
Tiene formas regulares, lo que facilita el aprovechamiento del espacio. Lo que no es sencillo es introducir objetos voluminosos porque el hueco libre que deja el portón no es particularmente grande (imagen). Opcionalmente hay un sistema («FlexFloor») que permite variar la altura del piso del maletero y crear un espacio debajo de éste para guardar objetos y distribuir mejor la carga.
Es posible aumentar el espacio de carga si se abaten los respaldos de los asientos posteriores. En ese caso, no queda un fondo de carga absolutamente plano porque los respaldos de los asientos forman una pendiente (imagen).
Se pueden transportar objetos de gran longitud, como unos esquís, sin necesidad de abatir los respaldos traseros porque hay una trampilla que conecta el maletero y el habitáculo (imagen).
De serie, el Astra GTC lleva un kit de reparación de pinchazos. Opcionalmente puede llevar una rueda de repuesto de emergencia (imagen). No puede llevar el sistema para transportar bicicletas («FlexFix») que sí pueden tener las demás variantes del Astra (y otros modelos de Opel).
El maletero tiene ganchos para colgar bolsas en los laterales, cuatro argollas en el piso que permiten sujetar una red o unas cintas elásticas.
Calidad de acabado
El habitáculo del Astra GTC, como el del Astra y el Astra Sports Tourer, dan una buena sensación inicial de calidad. Esta sensación se ve reforzada cuando se rueda por firmes en mal estado porque no aparecen ruidos molestos producidos por la suspensión o por las piezas que componen el interior. Todo parece bien ensamblado. Sin embargo, al tacto se pierde sensación de calidad porque los bordes de algunas piezas, especialmente las molduras decorativas, tienen bordes afilados. Por otra parte, en varias unidades que hemos probado, había holguras en la fijación del tapizado del techo.