En el nuevo Boxter (código interno 987), un 80 por ciento de los componentes son nuevos respecto al modelo reemplazado (código 986). A simple vista es algo que no se puede adivinar, dado que la apariencia de uno y otro no es muy diferente.
En el 987 todos los paneles metálicos de la carrocería son nuevos, no conserva ningún elemento de la suspensión y sólo algunos largueros de la estructura.
Porsche ha reducido ligeramente los coeficientes aerodinámicos de penetración y de elevación, aunque la superficie frontal ha crecido (de 1,94 a 1,96 m2). El Boxster ahora tiene un Cx de 0,29 y el Boxter S de 0,30; en los modelos anteriores estos valores eran 0,30 y 0,32 respectivamente. Esta mejora abarca un conjunto de medidas tales como pequeños cambios de diseño en la carrocería, en las tomas de aire de refrigeración en los retrovisores o en el spoiler retráctil trasero (que se despliega automáticamente a partir de 120 km/h ó mediante un botón en el salpicadero).
Parece ser que el cambio que más ha influido en la mejora aerodinámica (y en el consumo) ha sido el incremento de la superficie carenada del inferior de la carrocería (un 70 por ciento más) . Porsche tiene un túnel de viento que simula corrientes de hasta 250 km/h y donde se puede ensayar con vehículos a tamaño natural (no maquetas).
Los elementos de la carrocería son de distintos tipos de acero, salvo los capós delantero y trasero, que son de aluminio. Porsche argumenta que no fabrica una carrocería íntegramente en aluminio porque —a igualdad de rigidez y seguridad— sólo pesaría un 10 por ciento menos (de los 250 kilos que pesa sin puertas) y tiene el inconveniente de que hay muchos menos servicios técnicos donde se pueda reparar con garantías que si fuera de acero.
Sí ha usado aluminio en el capó delantero y trasero para eliminar en la medida de lo posible el peso que está situado alto y lejos del centro del vehículo (lo que reduce el momento de inercia en el eje vertical); se ahorran 9 kg.
Otra medida para reducir el peso en las partes altas es el uso de magnesio en la estructura de la capota y unos asientos que pueden ir un poco más cerca del suelo (20 mm). Cuanto más bajo esté el centro de gravedad, el coche es capaz de soportar más esfuerzos laterales.
No tiene rueda de repuesto (según Porsche se ahorran 10 kilos), tiene 5 kilos menos que el anterior en cableado, el escape pesa 4 kilos menos (tiene chapas más finas), y otros 4 en material aislante acústico.
El nuevo chasis tiene una resistencia a la flexión un 14 por ciento mayor y, a la torsión, un 9 por ciento mayor. Según Porsche, la rigidez torsional no varía si se mide descapotado o con el techo duro opcional colocado (fabricado en aluminio y de 23 kilos de peso). No obstante el nuevo Boxster pesa 20 kg más que el anterior; el Boxster S pesa 25 kg más (1.370 y 1.420 kilos respectivamente).
La dirección es de cremallera y, a diferencia del anterior modelo, es de desmultiplicación varible. En los 30 primeros grados de giro del volante la relación entre lo que giran las ruedas y el volante es menor que a partir de ese momento. El volante es ahora regulable en altura y en profundidad.
Los discos de freno son ventilados en las dos versiones. En la versión de 2,7 litros los delanteros son de 298 mm de diámetro y los del Boxster S de 318 mm. Los traseros son en ambos casos de 299 mm (de 20 mm en uno y de 24 en el más potente). En la versión básica las pinzas (monobloque, que son más ligeras que unas convencionales) van pintadas en negro y son rojas en el Boxter S.
Porsche ofrece la posibilidad de montar en la versión más potente los frenos cerámicos PCCB (Porsche Ceramic Composite Brake); en este caso las pinzas van pintadas en amarillo. La ventaja de unos frenos así es básicamente una mayor resistencia al calentamiento; también aportan ventajas de reducción de masas no suspendidas, mayor duración o mejor resistencia a la corrosión. El inconveniente es el precio: 8.640 €.
Todos los Boxster vienen de serie con control de estabilidad (PSM). Tiene una programación específica que hace que, en caso de pérdida de trayectoria por debajo de 70 km/h, actúe más tarde que por encima de esa velocidad.
Se puede desconectar con una tecla en la consola, pero queda en funcionamiento «latente». Es decir; se conecta automáticamente si el conductor pisa el freno con la necesaria intensidad como para que el ABS actúe en una de las ruedas delanteras (si no activa el ABS, tampoco se activa el PSM).
La versión de 2,7 litros tiene de serie llantas de 17 pulgadas de diámetro, de 18 el Boxster S. Opcionalmente los dos pueden llevar llantas de 19 pulgadas de diferentes diseños.
El habitáculo es un poco más espacioso. Esta mejora viene dada por tres variantes: los pedales van entre 10 y 15 mm más lejos del asiento (dada una nueva estructura del tabique que separa el frontal del habitáculo, que también es más resistente), unos arcos antivuelco situados 31 mm más retrasados y unos asientos un poco más bajos (que dan más espacio al techo).