La versión Renault Sport tiene la misma plataforma que el resto de los Mégane 3 y 5 puertas, con una batalla de 2.625 mm. Sin embargo, las vías delantera (1.517 mm) y trasera (1.521 mm) se han incrementado 7 y 15 mm respectivamente.
El recorrido de la suspensión se ha reducido 65 mm en el eje delantero y 84 mm en el trasero. Tiene muelles menos flexibles: un 22 por ciento más duro delante (16 mm/100 kg) y un 12 por ciento; los amortiguadores son más duros.
Pero el cambio más importante se encuentra en el eje delantero de tipo McPherson, en donde se ha introducido un nuevo tren de pivote independiente desarrollado específicamente por Renault Sport Tecnologies para esta versión.
En una supensión McPherson normal, la dirección gira alrededor del eje del amortiguador. Eso quiere decir que desde el punto de apoyo de la rueda en el suelo, hasta el eje sobre el que pivota la dirección, hay una distancia relativamente grande (60 mm en el caso de un Mégane normal).
Cuanto mayor sea esa distancia, más posible es que la tracción o la frenada afecten a la dirección; es decir, hay un brazo de palanca más largo entre el punto de apoyo de la rueda y el eje de la dirección. Si, como en este caso, ocurre que la fuerza que hace el motor en tracción es muy grande al acelerar en curva, se notarían tirones en el volante.
Para limitar ese efecto, lo que ha hecho Renault es desplazar el eje de pivote de la dirección hacia afuera, para que quede más cerca del punto donde se apoya la rueda (32 mm, en este caso).
Eso lo ha hecho mediante un soporte del eje de pivote (2) desplazado con relación al amortiguador; sobre ese soporte gira el portarrueda (1). Otra modificación necesaria es impedir que se produzca una torsión del soporte del eje (2) de pivote sobre el triángulo inferior (3). Para eso Renault ha tenido que poner una bieleta adicional (4), que impide que el soporte del eje gire sobre el triángulo inferior. En esta imagen se puede ver el dibujo en un tamaño mayor, y en ésta se ve por donde pasan el eje de pivote de la dirección , con relación al eje del punto de apoyo de la rueda.
En lugar de recurrir a un porta mangueta solidario con el buje, se ha recurrido a un montaje diferente en el cual el pivote es independiente del soporte, reduciendo así de 60 a 32 mm la distancia entre el centro de apoyo de la banda de rodadura con la prolongación del eje de rotación. De esta forma, se consigue una mayor estabilidad en el guiado de las ruedas, especialmente en las fases de aceleración, frenado y en giros bruscos.
En la parte trasera se mantiene el esquema semi-independiente de brazos tirados con eje transversal de torsión que también se utiliza en el resto de los Mégane.
La puesta a punto de las suspensiones se ha realizado utilizando los neumáticos SportContact2 que Continental ha desarrollado para esta versión Renault Sport. Dichos neumáticos (225/40 R18 92 Y) tienen un compuesto especialmente adaptado a las características y peso del Mégane y se incluyen de serie como primer equipo del vehículo.