La primera versión de corte deportivo (el GT no lo es tanto) del Škoda Fabia tiene un motor Diesel. Es el cuatro cilindros de 1,9 l de cilindrada, turbocompresor variable, intercooler y alimentación por inyector-bomba.
Como en otros modelos del Grupo Volkswagen que lo llevan, en el Fabia da 131 CV (96 kW) de potencia máxima a 4.000 rpm. Es la versión de este motor que da 310 Nm de par máximo a 1.900 rpm, que es la que se usa en coches de motor transversal (en el Audi A4 y en el Volkswagen Passat da 285 Nm a 1.750 rpm).
Este motor solo estará disponible en el Fabia para la versión RS, y siempre con una caja de cambios manual de seis velocidades. Con esta combinación de motor y cambio, alcanza 204 km/h de velocidad máxima, acelera de 0 a 100 km/h en 9,6 s, y tiene un consumo medio de 5,6 l/100 km. Por tanto, es ligeramente peor que el Seat Ibiza con el mismo motor (tabla comparativa), que es el único semejante al Fabia RS en tamaño y potencia.
Con relación a un Fabia normal, la suspensión es más dura y está rebajada 15 mm. Tiene llantas de 16 pulgadas, discos en las cuatro ruedas (los delanteros ventilados) y pinzas flotantes (pintadas de verde). Tiene de serie antibloqueo de frenos y control de tracción, pero no control de estabilidad.
La decoración es la normal en este tipo de versiones. Por delante, se distingue de otros Fabia por la parrilla, el paragolpes, los antiniebla y el emblema. Por detrás, tiene distinto un pequeño alerón sobre la luneta y unas salidas de escape de acero inoxidables.
La decoración interior se basa en la combinación de colores para la tapicería; la instrumentación; el acabado de cuero para el volante, el pomo del cambio y el asa del freno de mano; los pedales, que son de acero inoxidable; y las alfombrillas. Como equipamiento opcional, puede tener faros de xenón y navegador.
Sólo se fabrica en cuatro colores: uno metalizado («Plata diamante»), uno perlado («Negro mágico») y dos normales («Amarillo limón» y «Rojo Corrida»). Estará a la venta en España en mayo.