Los sistemas híbridos del Corolla 2023 pertenecen a la quinta generación de este sistema de impulsión de Toyota. Las modificaciones respecto a la cuarta —que es la que tenía el Corolla 2019— se han centrado principalmente en conseguir más potencia y «más intervención de la parte eléctrica durante la marcha» para reducir el ruido del motor de combustión.
El incremento de potencia total se ha conseguido aumentando la potencia de los motores eléctricos de impulsión (que, además, son más pequeños porque el hilo del bobinado del inductor es más fino) de 72 a 95 caballos (en el caso de la versión 140 H) y de 109 a 113 CV (versión 200H). Los motores de gasolina son los mismos que antes; la versión 140H tiene uno de 1,8 litros y 95 CV mientras que el de la 200H es de 2,0 litros y 152 CV.
La unidad de potencia es nueva y reduce las pérdidas energéticas un 14 % en la versión 140H y un 6 % en la 200H. En la transmisión —compuesta por un epicicloidal (no es ni nunca ha sido un variador continuo de poleas) y un tren de engranajes— Toyota emplea ahora un lubricante de menor densidad para disminuir el rozamiento y un nuevo perfil en los dientes de los engranajes que incrementa la superficie de contacto. El diferencial es más pequeño y ligero.
La batería de ambas versiones también es nueva. Es más pequeña y liviana (hasta 18 kilos menos, según Toyota), y es de iones de litio. Hasta ahora solo era de este tipo en la variante de menor potencia; la de mayor potencia tenía una de níquel e hidruro metálico (fichas técnicas del Corolla 2019). Ambas baterías tienen un 14 % más potentes que las anteriores y la refrigeración es diferente (más silenciosa), aunque sigue siendo mediante ventilación por aire.