Carrocería cómoda y amplia
La carrocería del EBRO s400 tiene unas formas que favorecen el aprovechamiento del habitáculo y sus puertas son amplias. El acceso al interior es muy cómodo, ya no sólo por el hueco que hay para entrar, sino también porque los asientos están a una altura que a muchas personas les parecerá ideal. La posición conducción es la clásica de un SUV: se va erguido y con las piernas flexionadas en un ángulo próximo a 90 grados. En un MG ZS, por ejemplo, se va sentado a una altura inferior y con el cuerpo en una posición más tendida.
Los asientos delanteros (imagen) me han parecido cómodos en desplazamientos largos y cortos. En el nivel de equipamiento Excellence van tapizados en piel sintética (Eco Skin) y están calefactados (por cierto, este elemento cumple su función con rapidez).
El interior está bien aprovechado. En las plazas posteriores hay más sitio para las piernas que en modelos como el Nissan Juke o el Renault Captur, e incluso también hay algún centímetro más que en modelos ligeramente más grandes como el Toyota C-HR. La anchura entre puertas es similar a la de los modelos de Nissan y Renault nombrados anteriormente (más información en el apartado Mediciones del interior).
La cota más desfavorable del interior de este EBRO es la altura libre al techo en las plazas posteriores. Entre la banqueta y el techo hay 91 centímetros, que es un dato similar al que tienen los SUV menos espaciosos de un tamaño exterior similar. Si los ocupantes posteriores miden más de 1,80 metros y se sientan más o menos erguidos, es probable que rocen con sus cabezas en el guarnecido. Algunos competidores ofrecen unos cuantos centímetros extra como es el caso del MG ZS.
Lo peor de las plazas posteriores es la posición en la que van sentados los ocupantes. La banqueta va situada relativamente cerca del piso, por lo que las personas de más de 1,75 metros (aproximadamente) no llevarán las piernas perfectamente apoyadas. Por añadidura, esta banqueta parece estar a la misma altura que los asientos delanteros (incluso algo más baja) por lo cual sus ocupantes ven poco hacia delante (a lo que tampoco ayuda que los respaldos de los asientos delanteros son muy anchos por su parte superior).
El salpicadero tiene la típica distribución actual de dos pantallas de 12,3 pulgadas, una configurable para la instrumentación (imagen), otra para el multimedia (imagen). El sistema multimedia es compatible con Android Auto y Apple CarPlay de manera inalámbrica.
La pantalla central no es más o menos difícil de manejar que la de otros coches actuales, aunque requiere un tiempo cogerle el tranquillo a su estructura de menús, que no son muy vistosos. A mi me ha parecido que está situada algo lejos del conductor: para llegar a pulsar los iconos que aparecen en su parte derecha no es suficiente con estirar el brazo, sino que que también hay que separar el hombro del respaldo.
Debajo de la pantalla central hay un grupo de mandos físicos muy convenientes porque sirven para controlar el climatizador. También hay una hilera de botones para acceder de forma rápida a funciones como las cámaras de visión periférica (sólo para la versión Excellence), los modos de conducción o para regular el volumen del sistema de sonido (imagen). Se echa en falta un acceso directo al menú de los asistentes a la conducción o, mejor, un botón para elegir una configuración predeterminada de los mismos.
El interior, que no es llamativo, deja una sensación de calidad correcta ya que las piezas parecen bien encajadas entre sí, no hay ruidos cuando se circula sobre firmes en mal estado ni cuando se presionan las piezas con los dedos. El aspecto del salpicadero es algo mejor en el equipamiento Excellence ya que este va recubierto por un material blando que imita a la piel.
El sistema de climatización me ha parecido mejorable. En la unidad que he probado me ocurrió que no era capaz de mantener la temperatura constante al margen de las condiciones externas: la temperatura que un día me resultaba confortable no lo era en otro día, e incluso en otro momento. El sistema de radio también es susceptible de mejoras, pues sintoniza pocas emisoras y muchas de ellas se escuchan mal.
El maletero tiene un volumen de 430 litros hasta el techo. De momento EBRO no ha facilitado el volumen del maletero hasta la bandeja (que es como siempre lo publicamos en km77) pero, aproximadamente, es de unos 330 litros, por lo que se quedaría en una posición intermedia entre los mejores y los peores en este aspecto (listado, ordenado por volumen de maletero, de SUV híbridos entre 4,25 y 4,37 metros de longitud).
El piso del maletero no se puede colocar a dos alturas y tampoco es completamente plano, sino que tiene una protuberancia en su parte delantera derecha debido a que la batería de 12 V sobresale ligeramente (imagen).

