El Hyundai i20 es un turismo de 4,0 metros de longitud y cinco puertas. Llegó al mercado en 2009 y recibió pequeños cambios en 2012 (más información en el apartadoCambios con respecto al modelo anterior y otros detalles). Algunas de sus alternativas son el Citroën C3, el Peugeot 208, el Renault Clio, el SEAT Ibiza y el Škoda Fabia.
Está disponible desde 11 700 euros con un motor de gasolina de 1,2 litros de cilindrada y 85 CV y desde 13 950 euros con uno Diesel de 1,4 litros y 90 CV. También hay disponible otra versión con motor de gasolina de 1,4 litros y 100 CV desde 13 847 euros (todos los precios y el equipamiento).
Hyundai tiene previsto lanzar al mercado —en una fecha aún sin determinar— un motor Diesel de 1,1 litros de cilindrada y 75 CV con un consumo medio homologado de carburante de 3,8 l/100 km. Esta misma versión puede llegar a consumir 3,2 l/100 km si se instala el paquete «Blue Drive», que consta de un sistema de parada y arranque del motor durante las detenciones (Stop & Start) y de unos neumáticos de baja resistencia a la rodadura. De confirmarse este último consumo, el i20 sería junto con el Kia Rio 1.1 CRDi WGT de 75 CV —que utiliza el mismo motor— el turismo propulsado únicamente por un motor de combustión interna de menor consumo del mercado (listado comparativo).
Hemos tenido la oportunidad de probar con detenimiento la versión Diesel 1.4 CRDi de 90 CV. Es un motor que sobresale para mal por las vibraciones que produce y que se sienten en el volante, la palanca del cambio y los asientos, especialmente cuando está frío. Estas vibraciones son más notables que en muchos coches de la competencia, como un Renault Clio o un Peugeot 208 también con motores Diesel. El ruido que produce también es más alto y desagradable en frío que en caliente.
Su capacidad de aceleración es normal para un coche de su tamaño y potencia, y resulta fácil de aprovechar porque responde bien desde marchas largas. Su consumo, sin ser especialmente bajo, también entra dentro de normal en un coche así (más información en impresiones de conducción).
La conducción del i20 es agradable por el buen confort de marcha y la correcta estabilidad que tiene bajo diferentes circunstancias. En ciudad destaca por una muy buena visibilidad en todas las direcciones (por ejemplo, un Peugeot 208 deja mucha peor visibilidad en algunos ángulos) y porque gira en poco espacio. Algunos inconvenientes son la fuerte tendencia de la dirección al autocentrado y la poca precisión de la palanca de cambios, que requiere un periodo de adaptación para moverla con rapidez (más información en impresiones de conducción).
Los plásticos que conforman la parte superior del salpicadero tienen buen tacto, no así aquellos que recubren las zonas inferiores. Hay detalles en los remates de algunas piezas típicos de vehículos de calidad media baja (más información en impresiones del interior).
El habitáculo es amplio para cuatro adultos, destacando en especial la altura disponible hasta el techo para los pasajeros traseros. Las formas cuadradas de la carrocería ayudan a que el interior no solo sea grande sino que también lo parezca. Con el techo solar puede que las personas más altas rocen con la cabeza en el techo (mediciones del interior).
El volumen del maletero es 295 litros. Es uno de los más grandes entre los vehículos en el entorno de los 4 metros de longitud exterior (listado comparativo). Los asientos son abatibles, aunque la superficie de carga que queda no es plana.
Precio, equipamiento y coste del seguro
El Hyundai i20 no es un modelo especialmente barato. Con el motor Diesel de 90 CV está disponible desde 13 950 euros, un precio superior al de un gran número de alternativas como un Dacia Sandero, un Opel Corsa, un Kia Rio, un Škoda Fabia y un SEAT Ibiza de similar potencia. Sí es más asequible que un Ford Fiesta, un Renault Clio y un Peugeot 208 (listado comparativo). Algo similar sucede con las versiones de gasolina de 85 y 100 CV (listado comparativo para el motor de 85 CV y listado comparativo para el motor de 100 CV).
No obstante, sobresale porque incluso en las versiones básicas el equipamiento de serie es abundante, por lo que igualándolo en lo posible con sus alternativas, el i20 es una de las opciones más asequibles.
Hay cuatro niveles de equipamiento: «City», «Tecno II», «Tecno S II» y «Style S» (de menos a más equipado; ficha comparativa de los cuatro niveles). El motor de 85 CV sólo puede combinarse con el nivel más bajo «City». Éste incluye airbag frontales y laterales para conductor y pasajero, airbags de cortina, ABS, control electrónico de estabilidad «ESP», luces diurnas de led, volante regulable en altura y profundidad, aire acondicionado, cierre centralizado con mando de apertura a distancia, radio CD con MP3 y entradas «AUX» y «USB». La única opción disponible para el nivel «City» es la pintura metalizada (360 euros).
El nivel «Style S» sólo está disponible para el motor Diesel de 90 CV. Su equipamiento de serie añade a todo lo citado en el párrafo anterior los siguientes elementos: cámara de visión trasera, sensores de aparcamiento traseros, asientos delanteros con calefacción, acceso y arranque «manos libres», programador de velocidad, conexión Bluetooth para teléfono móvil, encendido automático de luces y limpiaparabrisas, climatizador y llantas de aleación de 16 pulgadas entre otras cosas. Nuevamente la pintura metalizada es la única opción (310 euros) (listado detallado del equipamiento «Style S».
Por debajo del nivel de equipamiento «Style S» está el «Tecno S II». Éste se diferencia del primero por la ausencia de la cámara de visión trasera, los sensores de aparcamiento traseros, el acceso y arranque por botón, los asientos delanteros con calefacción y el encendido automático de las luces y los limpiaparabrisas.
El equipamiento de cada uno de los niveles es «cerrado», es decir, no hay opciones —excepto la pintura metalizada—. Esto tiene como inconveniente la imposibilidad de adaptar el equipamiento a los gustos de los diferentes clientes.
Con el comparador de seguros de km77 se puede saber el coste anual de un seguro a todo riesgo sin franquicia para un Hyundai i20 1.4 CRDi Style S 90 CV cuando el tomador es un hombre estudiante de 25 años, residente en Madrid, que recorre entre 20 000 y 25 000 kilómetros al año y aparca el vehículo en la calle. La compañía Balumba es la que da un precio más bajo, 770,52 euros, pero con una calidad de póliza baja —4,4 sobre 10—. Contratar una póliza de mayor calidad, como la que ofrece Fénix Directo —6,7 sobre 10— implica un gasto mucho mayor —1612,94 euros al año—.
Si se mantienen las condiciones del tomador, pero se opta por un seguro a terceros con cobertura de lunas, el coste anual desciende a 321,38 euros al año, de nuevo con Balumba y de nuevo a costa de una calidad de póliza baja —4,7 sobre 10—.
Cambios con respecto al modelo anteriory otros detalles
Con respecto al modelo que comenzó a venderse en 2009 (más información), el modelo de 2012 tiene cambios de aspecto en el frontal —similar al de los últimos modelos de Hyundai como el i30 o el i40—, los paragolpes, los faros, los pilotos y la gama de llantas de aleación y de embellecedores para las llantas de acero. En el interior uno de los cambios más significativos es que parte del salpicadero está recubierto con una pintura que tiene un tratamiento especial para que al tacto sea blanda. También cambia, por ejemplo, la instrumentación.
Debido a los paragolpes de diferente diseño, el i20 de 2012 es cinco centímetros más largo que el modelo anterior: mide 4,0 metros de largo. La anchura (1,71 metros), la altura (1,49 metros) y la distancia entre ejes (2,52 metros) se mantienen igual.
El i20 puede tener, como otros modelos de Hyundai, el «Plan Confianza Triple 5», que consiste en cinco años de garantía sin límite de kilómetros, cinco años de «control preventivo» del vehículo y cinco años de asistencia en carretera.
Para el mercado europeo, el nuevo i20 se fabrica en Turquía y en la India.