Mercedes-Benz CLA (2025) - Un duro rival para el Tesla Model 3 por consumo y autonomía real | Impresiones del interior

El Mercedes-Benz CLA 2025 sigue siendo, como ya ocurría en la primera generación, una berlina con un espacio interior justo, que puede ser suficiente para algunos usuarios. Lo mejor es el generoso recorrido longitudinal de los asientos delanteros, que permite colocarse muy cerca o muy alejado del volante. El espacio para las piernas en las plazas posteriores es correcto. La anchura entre puertas en las dos filas de asientos no es sobrada; por ello, los ocupantes de las plazas delanteras no van muy separados entre sí ni tampoco respecto de las puertas y, en la fila trasera, el espacio lateral es aún más limitado.

Lo menos favorable es la altura libre al techo en la segunda fila. Una persona de 1,80 metros sentada erguida rozará con claridad la cabeza en la zona del guarnecido donde termina el techo panorámico de cristal. Además, las plazas traseras no transmiten gran sensación de amplitud porque la carrocería se estrecha claramente al acercarse al techo. Probablemente, el CLA Shooting Brake resulte más adecuado para quienes necesiten usar con frecuencia las plazas posteriores ya que, probablemente, tenga más altura libre al techo.

Foto de - mercedes cla 2025

El techo panorámico de grandes dimensiones es de serie. No cuenta con cortinilla interior, pero Mercedes-Benz asegura que no es necesaria gracias al tratamiento que reduce la entrada de luz y calor al habitáculo. En un día soleado con hasta 25 grados de temperatura, el interior no era más caluroso de la cuenta; no sé qué pasará con temperaturas más elevadas.

En este CLA se percibe un claro avance en calidad. La consola central (ahora sin plástico negro brillante) y el salpicadero no tienen piezas que se muevan o crujan al presionarlas con moderación (el plafón de luces del techo sigue dando la impresión de estar algo suelto). Todo transmite una sensación más sólida que en el anterior CLA y también que en otros Mercedes-Benz de mayor precio que se venden en la actualidad. Otro ejemplo de esta mejora son los mandos eléctricos de ajuste de los asientos en las puertas: ya no son táctiles, sino que tienen un pequeño recorrido cuando se pulsan y, al hacerlo, no se mueve la pieza sobre la que van montados.

El puesto de conducción mantiene el estilo típico de las berlinas de Mercedes-Benz. El asiento puede colocarse bajo y también se pueden llevar las piernas muy estiradas si así se desea. El salpicadero no es muy profundo y ello ayuda a que el conductor tenga una referencia visual correcta de lo que está justo por delante, a diferencia de otros coches con salpicaderos más voluminosos y parabrisas más alejados. Los espejos retrovisores son pequeños para los estándares actuales, pero dejan ver bien lo que hay por detrás y a los lados.

Foto de - mercedes cla 2025

Mercedes-Benz ha situado las tres pantallas (la del acompañante es opcional; si no se incluye, la zona está cubierta con un plástico decorado con estrellas) a la misma altura, de modo que parecen una sola cuando están apagadas. Están cubiertas por una lámina de plástico brillante que provoca numerosos reflejos cuando el sol incide de frente.

Al principio, puede dar la impresión de que la pantalla central queda algo baja y no exactamente en el campo de visión. Además, a mi compañero de pruebas y a mi nos ocurrió que la parte derecha de dicha pantalla nos quedaba oculta tras nuestras manos derechas cuando agarrábamos correctamente el volante. Si estuviera algo más arriba quedaría más a mano y su visión estaría más despejada pero, probablemente, rompería la sensación de continuidad que tiene el salpicadero y estorbaría un poco para ver la carretera.

No he tenido tiempo suficiente para profundizar en el funcionamiento del sistema multimedia, pero mi primera impresión es que no es complejo y que probablemente no requiera un periodo largo de aprendizaje. Tampoco he probado a fondo el sistema de reconocimiento de voz con inteligencia artificial, que según Mercedes-Benz es muy avanzado (de ser así, reduciría de forma considerable la necesidad de buscar manualmente funciones en la pantalla).